Ayer fue 15 de abril fecha en que oficialmente ocurrió el fallecimiento del ídolo de Sinaloa y todo México, PEDRO INFANTE CRUZ.

Pedro Infante: 'Voy a morir en un accidente de aviación'

Así se lo hizo saber al productor Ismael Rodríguez tras el sepelio de Blanca Estela Pavón; sufrió dos accidentes de aviación antes de su muerte en 1957

“Se que yo también voy a morir en un accidente de aviación”, dijo Pedro Infante al productor cinematográfico Ismael Rodríguez tras la muerte de Blanca Estela Pavón.

 Una de las pasiones del intérprete de Amorcito corazón fue la aviación.

Con base en información difundida en su momento por Notimex se precisaron tres accidentes.

PRIMER ACCIDENTE

El primer percance sucedió en Guasave, Sinaloa. Fue cuando volaba en una avioneta monomotor Bellanca Cruisair con matrícula XB-DIB. Se informó  que el accidente se presentó luego de una presentación en un teatro. Como una de las causas que provocó el incidente fue la falta de luz, pero no es cierto, en el aeropuerto rural había varias camionetas alumbrando la pista y fue un error de pilotaje del novel piloto que era Pedro en ese momento y una de las llantas de la aeronave enganchó el cerco que delimitaba el campo aéreo. Por fortuna salió casi  ileso ya que  debió ser atendido por una herida en el mentón. Nada serio

SEGUNDO ACCIDENTE

Ocurrió el 22 de mayo de 1949 en Zitácuaro, Michoacán, cuando piloteaba una avioneta tipo Cessna T-50, en viaje desde Acapulco hacia la ciudad de México. En aquella ocasión iba acompañado de Lupita Torrentera con quien procreó 3 hijos.

Como resultado del accidente, Infante sufrió una severa lesión en la cabeza, desde la parte media de la frente hasta la oreja izquierda. Incluso, perdió la audición en un oído. Fue intervenido de manera quirúrgica a fin de colocarle una placa de platino en la frente y misma que sirvió para identificar su cadáver el día en que perdió la vida.

Su rostro cambió e incluso, se tuvo que confeccionar un bisoñé para que siguiera trabajando, pues tenía pendientes varias películas. Fue en ese tiempo que quedó expuesta la doble vida amorosa del actor.

Después de este accidente se convirtió en un hombre deportista, pues los médicos le habían diagnosticado diabetes, por lo que todos los días se le veía corriendo y remando en el bosque de Chapultepec. Poco después se ejercitaba en el gimnasio que instaló en su casa de Cuajimalpa.

TERCER ACCIDENTE

Pedro Infante murió el 15 de abril de 1957 en Mérida, Yucatán, víctima de un accidente aéreo. Junto con él perdieron la vida otras tres personas: el piloto Víctor Manuel Vidal Lorca, el mecánico Mariano Bautista y Ruth Rossel, quien tendía ropa en el patio de su casa, donde cayó el avión.

También murieron dos perros de raza mastín y un chango que regalaría a sus hijos y a Irma Dorantes. Se constató además, que la nave Consolidated B-24J Liberator con matrícula XA-KUN cargaba bultos con pescados y telas. 

La suerte del artista ya estaba echada, pues el 14 de abril intentó viajar en línea comercial a la Ciudad de México pero no encontró boleto. Se dijo, incluso, que un periodista de la revista española “Mañana” retrató sus manos y le vaticinó un fatal accidente.

Sobre Pedro se han contado muchas historias e inclusive anduvo una persona cantando profesionalmente y se anunciaba como Antonio Pedro que ahora mismo hay miles de personas que aseguran que era Pedro Infante, pero ninguna autoridad ni familiares del artista han dicho que era el actor que tanto admiramos.

En Mérida, Yucatán con un pequeño altar colocado a la puerta de su domicilio, ubicado justo frente al monumento a Pedro Infante en la 62 por 91, la familia de don Marcos Cua Cab rindió un año más homenaje a la memoria de Pedro Infante, quien falleció hace 64 años en un accidente aéreo en la capital yucateca.

Y es que a pesar de que existen restricciones por la pandemia de COVID-19 que impiden organizar eventos masivos, como tradicionalmente se realizan los días 15 de abril en Mérida, el cariño hacia el ídolo de México, no se ha visto mermado y aunque a distancia, a través de transmisiones en Facebook, muchos siguieron las mañanitas que casi casi a puertas cerradas organizaron los vecinos del Rumbo de la Socorrito encabezados por Luis Canto en el monumento de la calle 87 entre 54 y 56 del centro de la ciudad. En este lugar a partir de las 9 y media de la mañana, se organizó una ofrenda floral y acompañado del mariachi Gallos de Muxupib, Daniel Medina “El Gavilán” interpretó éxitos de Pedrito, como “Cien Años” y “Amorcito corazón”, en un evento que con la presencia de menos de 50 personas, incluyendo vecinos, artistas y autoridades invitadas, se realizó con todos los protocolos sanitarios y que contó también con la participación de la famosa banda “Colitos”, que hasta hicieron bailar al público tocando “Nana Pancha” y “El Piojo y la Pulga”.

Al respecto, don Wilbert Cool Ramos, director del grupo, platicó a Peninsular Punto Medio que aquel trágico 15 de abril de 1957, tenía 5 años de edad, vivía por el rumbo donde hoy se encuentra el Ejército de Salvación y escuchó el ruido de un avión. “Salí a acechar y como a los dos o tres minutos se escuchó una explosión. “Entre corriendo a avisarle a mis papás, y no recuerdo si mi papá tenía parientes por allá pero de inmediato salimos al lugar y cuando llegamos el avión estaba en llamas todavía.

 No se por qué pero nos dejaron pasar,  y vi muchas cosas que no se me olvidan: el pescado tirado, el aceite, la ropa de uno que viajaba en el avión y que se quedó colgada en un árbol, y luego confirmaron que Pedro Infante había muerto, de esto hace 64 años”, recordó.

En las próximas horas los festejos siguen con la carrera virtual organizada por el Ayuntamiento de Mérida y a las ocho de la noche está programado un evento musical que también podrá seguirse a través del Facebook Homenaje por la muerte de Pedro Infante. Texto: Manuel Pool.

En la ciudad de México por primera vez fue suspendido el homenaje a Pedro Infante en el Panteón Jardín; pocos fans se dieron cita para cantarle y recordarlo, el coronavirus19 ha sido la causa aaunque también podría ser que es el resultado de la publicidad que se le ha dado al llamado Antonio Pedro que dicen era en realidad el actor sinaloense, aunque ese Antonio Pedro ya murió.

En fin, Pedro Infante sigue enamorando a las  mujeres que ven sus películas y escuchan sus interpretaciones, “como Pedrito no ha existido otro ni existirá nunca más”, me decía una señora allá en la ciudad de México, que juraba que la había abrazado y besado.

Pues que descanse en paz el mazatleco que creció y se hizo hombre en Guamúchil Sinaloa  y trabajó en la carpintería de don Jerónimo Bustillos, donde conoció y se hizo fraternal amigo de Jesús Bustillos Salomón, hijo del dueño de la carpintería.