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¿Quiénes son los verdaderos enemigos de la humanidad?

ÓRGANO OFICIAL DEL COMITÉ CENTRAL
DEL PARTIDO COMUNISTA DE CUBA

La Inteligencia Artificial es el futuro, no el peligro; la amenaza real es la barbarie humana

Autor: Raúl Antonio Capote | Esta dirección de correo electrónico está protegida contra spambots. Necesita activar JavaScript para visualizarla.

12 de marzo de 2024 01:03:46

Foto: anáhuac mexico

La Inteligencia Artificial (IA) ha despertado en los últimos años cientos de interrogantes y, en la medida en que ha ido conquistando espacios cada vez más importantes, el temor a su desarrollo crece.

¿Estamos a las puertas de un apocalipsis? ¿Puede la IA llevar a la extinción de la humanidad? Los defensores y detractores de la IA defienden con pasión sus posiciones, temores o esperanzas.

A finales del siglo XV, Leonardo Da Vinci diseñó el primer robot, al que nombró automata cavaliere, creado para divertimento de los invitados al palacio Sforza.

Sin embargo, no fue hasta 1921 cuando se popularizó realmente la palabra robot, a través de la obra de teatro del autor checo Karel Capek, titulada Rossum’s Universal Robots.

La puesta en escena trataba sobre una empresa que construía humanos artificiales orgánicos, destinados a aliviar la carga de trabajo de las personas; sin embargo, los androides se sublevaron y conquistaron la Tierra.

El temor a la sustitución del ser humano por las máquinas se convirtió en fuente de inspiración de numerosas obras de ficción. Creaciones literarias como El Chistoso, de Isaac Asimov; Los superjuguetes duran todo el verano, de Brian Aldiss; y Golem, de Stanislaw Lem; así como filmes en modo Terminator, Robocop, Metrópolis, WALL-E, Ex Machina y Blade Runner, marcaron pauta para defender o negar esta tesis.

En 1970 nació Shakey, el primer robot móvil controlado por la Inteligencia Artificial, capaz de razonar sobre sus propias acciones.

Más allá de la ficción, en el mundo real, la IA hace posible que las máquinas aprendan de la experiencia, se ajusten y realicen tareas como seres humanos, mediante el adiestramiento profundo y el procesamiento del lenguaje natural.

No hay nada terrorífico en esta tecnología que brinda muchos beneficios en todas las áreas: la industria, la atención a la salud, el comercio, las manufacturas, y muchas más.

La IA es el futuro, no es el peligro. La amenaza real, lo que puede conducir a un desarrollo catastrófico, incluso a la aniquilación de la civilización, es la barbarie humana, la cultura del consumo, del descarte, de la guerra y de la devastación del ecosistema que habitamos.

¿Quiénes fabrican armas de exterminio masivo y construyen laboratorios de guerra biológica y misiles cargados de ojivas nucleares que bastarían para arrasar a varios planetas Tierra?

No son las máquinas, son los seres humanos quienes no han logrado traspasar las fronteras de su prehistoria; esos que sueñan con androides que matan y misiles atómicos que piensan, a fin de usarlos en sus planes de conquista.

El peligro está en la ambición desmedida y en la ceguera de los que se consideran dueños del mundo.