Pascal Beltrán del Río Bitácora del director
En entrevistas recientes, los dirigentes nacionales de los partidos que forman la alianza Va por México –PRI, PAN y PRD– me han dicho que la oposición no tiene prisa para iniciar el rejuego de sus aspirantes presidenciales.
De diferentes maneras, Alejandro Moreno, Marko Cortés y Jesús Zambrano sostienen que sería un error picar el anzuelo que ha lanzado el presidente Andrés Manuel López Obrador al adelantar el proceso sucesorio. En corto, algunos actores políticos admiten que es mejor no asomar por ahora la cabeza, porque se convertirían en blanco de ataques por parte del gobierno.
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Sin embargo, si uno observa las encuestas sobre la carrera de 2024, verá que quienes están en mejor posición en cuanto al conocimiento que tiene la opinión pública de ellos son los que, de manera directa o indirecta, se colocaron antes en la línea de salida.
Eso incluye a la oposición, en la que por ahora destaca Enrique de la Madrid. Hace casi un año que el exsecretario de Turismo dijo que buscaría la candidatura y, aunque inicialmente su destape no generó mucho interés, poco a poco se ha ido metiendo en los sondeos de opinión.
Es pronto para saber quiénes estarán en la boleta electoral de la elección presidencial, pero lo indudable es que arrancar temprano es fundamental. Lo demostró Vicente Fox desde finales de los años 90. Para cuando reaccionaron los demás panistas interesados en la candidatura del año 2000, el guanajuatense –quien había salido tres años antes de la elección– ya les llevaba tanta ventaja que ya nadie más se animó.
No entiendo muy bien los argumentos de quienes se contienen y esperan “el mejor momento” para anunciar sus intenciones. A diferencia de las corcholatas del oficialismo –que tienen que amarrar sus ideas propias y concentrarse en destacar su lealtad hacia López Obrador–, los prospectos de la oposición no tienen limitaciones para hablar sobre sus aspiraciones y sobre los temas espinosos a los que precandidatos de Morena no osan acercarse.
Otra aspirante que ha entendido los beneficios de arrancar temprano es la senadora panista Xóchitl Gálvez, quien se adelantó en anunciar su aspiración a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, dejando atrás a los otros precandidatos de la oposición y aprovechando el vacío del oficialismo en torno de la sucesión de Claudia Sheinbaum.
Por supuesto, sería ideal que quienes ocupan cargos de decisión –ya sean de elección o de designación– se dedicaran exclusivamente a hacer el trabajo para el que les paga el contribuyente y se dejaran de futurismos, pero es un hecho que, en la política mexicana de estos tiempos, los comicios comienzan a decidirse mucho antes de que abran las urnas e incluso antes del inicio de las campañas formales.
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