Enrique Aranda De naturaleza política
Lo dicho: la confrontación fratricida apenas comienza…
Más de una vez, en los tres últimos años, legisladores y funcionarios del más alto nivel de la administración estadunidense han alzado la voz y externado su preocupación y abierta crítica al gobierno mexicano ante el innegable fracaso de sus políticas en materia de combate a la inseguridad y violencia, igual que en fecha reciente lo hiciera el pleno del Parlamento Europeo, ante la multiplicación de amenazas y asesinatos de periodistas atribuidos en un primer momento al crimen organizado.
En las últimas semanas, el nivel del discurso de las fuentes señaladas se elevó en forma notable para, ahora, cambiar sus otrora “duros señalamientos” contra la gestión de Andrés Manuel López Obrador en abierta denuncia y advertencia sobre la intromisión de bandas criminales en la selección o intimidación de candidatos de prácticamente todos los partidos a puestos de elección, como parte de un fenómeno que las agencias de inteligencia de la administración (encabezada por Joe) Biden no han dudado en tipificar como narcoelecciones o, peor aún, para acusar al tabasqueño y los suyos de “haber perdido el control del país” ante los cárteles, como lo hizo apenas el viernes William Barr, el exfiscal general del impresentable amigou Donald Trump, quien aprovechó una entrevista con Fox News para externar su preocupación de que “el gobierno de México vaya a compartir soberanía con los cárteles y llegar a un modus vivendi con ellos”.
Que el asunto no refiere a algo despreciable y tiende a agravarse al paso de los días, no cabe la menor duda. Menos cuando, insistamos, el nivel de la crítica y señalamientos contra la administración de la 4T tienden a escalar… prácticamente al mismo ritmo que se evidencia el absoluto fracaso de la ridícula política de abrazos y no balazos aplicada por aquélla y que, fuera de algunas acciones o detenciones de capos notables, pocos o nulos resultados ha aportado en lo que al abatimiento de los niveles de inseguridad y violencia se refiere.
Si a tales preocupaciones y evidente malestar existentes a nivel mundial contra Ya Sabemos Quién y sus afines, agregamos las inquietudes que alienta el cotidiano embate oficial contra periodistas y medios o, peor aún, la directa agresión de otros actores –el crimen organizado, entre otros más, sin duda alguna– contra la libertad de expresión y de prensa, o la vida misma de los comunicadores, el escenario parece en verdad desalentador…
ASTERISCOS
* Ahora sí que créalo usted, si le parece y si no, sólo deséchelo, pero son cada vez más las versiones según las que –“emprendedores” como son– los hombres de Luis Cresencio Sandoval estarían por echar a volar un nuevo negocio: el uso de helicópteros para conectar el céntrico Campo Marte con el lejanísimo Aeropuerto (casi) Internacional Felipe Ángeles…
* Tan ilegales como los del gobierno y su partido, los espectaculares llamando a votar en la consulta de revocación “para que AMLO se vaya ¡porque nos ha mentido, nos ha robado y nos ha traicionado! Comienzan a invadir el espacio público. Asistir al costoso e innecesario ejercicio es lo improcedente…
Veámonos aquí mañana con otro asunto De naturaleza política.