Quedó claro que, en los nombramientos de sus colaboradores, el presidente López Obrador no toma en cuenta el grado académico, los conocimientos ni la experiencia que pudieran tener en el cargo que les encomienda. Lo que cuenta para él es la cercanía, el paisanaje, la lealtad.
Al comentar en la mañanera el cuestionado nombramiento del tabasqueño Javier May como director de Fonatur —encargado del proyecto del Tren Maya— el mandatario hizo una patética apología de la ignorancia.
Dijo textual:
“Javier May es una gente de trabajo, de campo. Fue muy cuestionado porque resulta que no terminó la licenciatura. De los tres mejores presidentes de México, hay uno que estudió hasta la educación básica y fue un gran presidente, y de los peores presidentes en la historia han estudiado, se han graduado en Harvard. Eso no es decisivo”.
Lázaro Cárdenas es el presidente que recibió una educación elemental, antes de unirse a la Revolución Mexicana, que marcó el inicio de su carrera militar.
Carlos Salinas de Gortari y Felipe Calderón se graduaron en Harvard. El primero como doctor en economía política y el segundo tiene una maestría en administración pública en la prestigiosa universidad.
“No porque yo soy científico —dijo López Obrador— ya voy a ser político, no; yo soy intelectual y voy a ser político, no. Cuando se meten los intelectuales políticos, bueno ahí está el caso de Vargas Llosa, y de Krauze, imagínense diciendo que asesinó más gente Díaz Ordaz que Porfirio Díaz”.
Las palabras del Presidente no deben sorprender. Sus calificaciones en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM fueron mediocres. Aunque acabó la licenciatura en 4 años, tardó 14 en titularse.
* A pesar de que el diezmo que Delfina Gómez cobraba a trabajadores del municipio de Texcoco fue investigado, documentado y sancionado por el TEPJF, el presidente López Obrador y el senador Higinio Martínez no paran de repetir que la titular de la SEP es honesta, digna y un ejemplo para los mexicanos.
Higinio, integrante del Grupo Acción Política que, según el INE, se benefició del “voluntario” atraco, coincidió con López Obrador en que detrás de las descalificaciones a la maestra hay un ambiente de “linchamiento mediático”, previo a las elecciones de gobernador en el Estado de México.
El monto del diezmo descontado en el municipio es de 13 millones 752 mil 414 pesos, aunque la multa que se le impuso a Morena no llega ni a la tercera parte: 4.5 millones de pesos.
La “honestidad” de Delfina fue cuestionada ayer por Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad. Esta organización difundió un video en el que da a conocer las “pruebas” del diezmo descontado a trabajadores de Texcoco.
El documento destaca que, en el DIF del Estado de México, en ese entonces dirigido por Alejandro Gómez Álvarez, hermano de Delfina, también se retuvo el diezmo a sus trabajadores. Su firma aparece en pólizas de cheques obtenidas por el INE.
“En pólizas y en cheques del ayuntamiento de Texcoco, algunos firmados por la propia Delfina Gómez, consta que una de sus asistentes, María Victoria Anaya Campos, recibió —de febrero de 2013 a febrero de 2015— más de 10.8 millones de pesos provenientes del diezmo retenido a los trabajadores.
“Sara lveth Rosas Rosas, quien entonces era militante de Morena, también recibió parte del dinero retenido a los trabajadores de Texcoco”, puntualiza.
MCCI publica una lista de otros involucrados en el diezmo: Horacio Duarte Olivares, actual administrador general de Aduanas; Alberto Martínez Miranda, extesorero en el municipio y hermano de Higinio, a quien en el expediente del INE identifican como líder del Grupo Acción Política.
“María Victoria Anaya Campos, actualmente directora de área en la Secretaría de Bienestar, y Sara lveth Rosas Rosas, regidora en Texcoco”.
* El morenista Sergio Gutiérrez Luna, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, está obsesionado con los consejeros electorales Lorenzo Córdova, presidente, y Ciro Murayama.