Desde el jueves una serie de eventos desafortunados se conjugaron para que la presentación del primer Paquete Presupuestal de este gobierno pareciera mucho más una comedia de errores, que la hoja de guía de Claudia Sheinbaum en lo económico.
Primero, el coordinador de los diputados del partido oficial dijo que era urgente una reforma fiscal, la Presidenta “lo puso en su lugar”. Sin gritos o bravatas, que eran tan comunes el sexenio pasado, Sheinbaum cuestionó el uso de helicópteros por parte de Ricardo Monreal y recordó los principios de austeridad de su movimiento político.
Después, como si no pasara nada, desestimó la ocurrencia de la reforma fiscal. No había que decir mucho: la Presidenta desde la campaña dijo que no era necesaria. Quizá Monreal quería jugar vencidas con la Presidenta o algo así de imprudente: perdió. Terminó presentándose en un video pidiendo perdón de las bravatas de la jornada previa.
REMATE GAZAPO
Hasta ahí todo parecía producto de la grilla que claramente se está dando en Morena entre quienes creen que Claudia Sheinbaum era una calca o marioneta y no la Presidenta en funciones y todo el poder.
En la conferencia de prensa de la mandataria, previa a que el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, entregara el Paquete Económico, la Presidenta dijo que habría un aumento en el presupuesto para las instituciones de educación.
El documento que se presentó al Congreso tenía un recorte monumental al presupuesto de las universidades. La UNAM, la Autónoma Metropolitana y El Colegio de México emitieron sendos comunicados criticando el recorte y haciendo ver que iba en contra de lo expresado por la Presidenta.
Por la tarde, la Secretaria de Hacienda, a su vez, emitió un comunicado señalando que por un error de la Subsecretaría de Egresos, encabezada por Bertha Gómez, se había puesto el recorte, pero que ya estaban en contacto con la mesa directiva para corregir el texto.
Si bien muchos hicieron teorías de la conspiración sobredimensionado la capacidad de reacción de las universidades y el supuesto miedo de la Presidenta a la comunidad estudiantil, el asunto es mucho más grave.
¿Cómo es posible que un falla tan grande y tan evidente haya llegado al documento total de la economía? Abre espacio para suponer otras inconsistencias y errores graves; en el menos malo, de un descuido en la Subsecretaría de Egresos, que deberá tener consecuencias graves al interior del equipo de Gómez.
REMATE SUPUESTO
Mucho se especuló sobre los supuestos en los que se basaría el Paquete Económico y, la verdad, salió mejor de lo que esperaba el consenso de los analistas.
El crecimiento planteado para el PIB en un rango que va de 2 a 3% no debe ser una sorpresa para nadie.
Si bien este número es muy superior al consenso de los analistas y algunas casas hasta consideran que podría ser cercano al cero por ciento, un hecho concreto es que, mientras Hacienda pocas veces confirma o ratifica sus estimaciones, los analistas pueden cambiar de opinión cada 15 días.
La estimación del precio del petróleo es correcta, puesto que incluso está por debajo de lo esperado por el mercado.
En cuanto al tipo de cambio promedio en 18.70 pesos por dólar, hay quienes consideran que es demasiado optimista y necesariamente refieren al factor Donald Trump y lo que imaginan que podría hacer con la conducción de la economía.
Lo más relevante es cómo se manejaría el déficit. Nadie esperaba que se cumpliera la promesa del sexenio pasado de regresar a la trayectoria histórica de un solo golpe.
Así, la Secretaria de Hacienda estimó que el déficit total del sector público será de 3.9% del PIB. Todos los analistas decían que un número entre 4 y 5% del PIB era creíble, pero que sería mejor si era más cercano a 4%. Así pues, se trata de una cifra que se puede manejar correctamente.
REMATE RECONDUCIDO
Es necesario que Rogelio Ramírez de la O, Édgar Amador y Bertha Gómez reconduzcan la discusión del Paquete Económico, no sólo con los legisladores o los analistas y los mercados, sino al interior de la propia Secretaría de Hacienda.
Por momentos da la impresión que en la dependencia se han dejado atrapar por una narrativa que, en los hechos, no tiene ningún sentido.
Una semana sí y otra también aparecen versiones infundadas sobre la permanencia del secretario o sobre pugnas entre sus miembros. Resulta imperativo que den señales de unidad para enfrentar los desafíos que tiene el inicio de la administración. Que superen la posición de debilidad que hoy los hace vulnerables a grillas como las de Ricardo Monreal y errores propios.