Francisco Garfias
Arsenal
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Dante Delgado está enojado. Sus gestos, actitudes y palabras nos dejan claro que su rechazo al PRIAN es mayor que su deseo de arrebatarle a Morena la Presidencia de la República.
El objetivo del coordinador nacional de MC es hacer pagar al Frente Amplio por México —o como se llame— el descarrilamiento definitivo de la candidatura presidencial de Samuel García. A estos dos partidos, a los que no baja de “carroñeros”, los señala como responsables de lo ocurrido en Nuevo León. Los pinta como un demonio al que hay que exorcizar.
Lamentablemente, no ve errores ni falta de oficio en el comportamiento del gobernador de Nuevo León. Samuel quiso imponer a su sucesor por seis meses. Sabía que, si la licencia era mayor a 30 días, el Congreso designaba al interino. La solicitó por seis meses para irse a la campaña presidencial.
El gobernador emecista creyó que estaba por encima de la norma. La SCJN lo puso en su lugar. Tuvo que dar marcha atrás en sus aspiraciones presidenciales y reasumió la gubernatura después de tres días de confusión en los que no se sabía quién era el gobernador. En un gesto de sensatez, Luis Enrique Orozco, el interino nombrado por el Congreso, subió un mensaje a redes en el que informa que se hace a un lado “para favorecer la paz y la gobernabilidad”. Nuevo León regresó a la normalidad. De nada de eso se habló en el discurso de Dante, el único orador que pudo escuchar la prensa. La reunión del Consejo Nacional de MC se realizó a puerta cerrada.
En la parte final del discurso que pronunció con motivo del 25 aniversario del partido naranja, celebrado en el Salón Olmeca del WTC, el senador veracruzano apareció enfundado en un chaleco de MC. Llevaba tenis “fosfo fosfo”, en solidaridad con Samuel y Mariana. Los mostró ante un alborotado auditorio que todo le aplaudía. Dijo: “Si creen que con lo que hicieron vamos a colgar los tenis, están muy equivocados. Hoy los tenemos más puestos que nunca”.
Y vino la amenaza: “Desde aquí le digo al PRIAN que México y MC no vamos a olvidar y muy pronto van a saber lo que es meterse con Movimiento Ciudadano”. Nos llamó la atención que ni en el mensaje ni en las declaraciones que al final le hizo a la prensa, Dante haya aludido el papel que ha jugado el presidente López Obrador en la superada crisis en Nuevo León.
* Una vez que finalizó sus declaraciones a los reporteros, lo alcanzamos para preguntarle si no tenía nada que opinar sobre el papel de AMLO en la citada crisis. Y otra vez se fue sobre el PRIAN: “El problema que tienen es que López Obrador mete la lengua donde se lo permiten. Todo lo que dice Andrés es lo que hace el PRIAN. Por eso hacen tantas imbecilidades. Los provoca para que las hagan... El presidente se pitorrea de ellos. Hace creer a la sociedad nacional que ya no hay nada que hacer porque ya ganó Morena. Ellos, en lugar de tener la mínima reflexión política después de la debacle del Estado de México, lo que hacen es cambiar de candidata. Bajan a Lilly Téllez y automáticamente suben a Xóchitl y dicen que es un fenómeno. Vean las encuestas. No hay forma de que el PRIAN sea competencia. Por una sola razón. La gente lo verbaliza, lo rechaza. Se siente decepcionada de ellos. Dicen que ya le fallaron al país”. Y le aplicó los santos óleos a la propuesta de Xóchitl de sumar a MC al frente opositor: “Están tan enfermos emocionalmente que están golpee y golpee. Acaba de tomarse la decisión y ya dicen ‘invitamos a Movimiento Ciudadano’. Un desequilibrio emocional de esa naturaleza nos debe de preocupar a todos”. Sobre quién será el candidato de MC a la Presidencia dejó ver que no le corre prisa. Lo dará a conocer el 20 de enero. Puede ser interno o externo. La baraja está abierta. Marcelo Ebrard no está descartado, pero hay que ver si quiere. Dante dice que no ha hablado con él, pero dejó claro que los documentos básicos prevén candidaturas ciudadanas.
