Martes, Noviembre 26, 2024
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Inconformidades, especulaciones y retraso en el proceso de Morena

 

Francisco Garfias

Francisco Garfias

Arsenal

 

Hacia la medianoche, Morena había dado los resultados de las encuestas para elegir candidato a gobernador en ocho de las nueve entidades donde habrá elecciones en el 2024.

Dejaron a la CDMX al último. Al cierre de esta columna no se sabía oficialmente si era Omar García Harfuch o Clara Brugada, pero las especulaciones estaban a la orden del día.

La exalcaldesa de Iztapalapa llevó porra y  mariachis al hotel Camino Real de Anzures, donde se hizo el anuncio. No faltó quien viera en ello un presagio de la derrota del exsecretario de Seguridad Pública local. Ese escenario se leía como un revés para la virtual candidata presidencial guinda, Claudia Sheinbaum, cuyo delfín es García Harfuch.

 

La especulación incluía el fantasma del maximato y el calificativo de “vacilada” para la entrega del bastón de mando que le hizo AMLO. En Chiapas ganó la medición el senador Eduardo Ramírez; Ricardo Sheffield en Guanajuato; Carlos Lomelí en Jalisco. Pero el margen por el que ganaron –menos de 10 puntos– los sujetaba a la regla de paridad de género: cinco mujeres y cuatro hombres. En esos casos, las mejor posesionadas son Sasil de León en Chiapas; Alma Alcaraz en Guanajuato y Claudia Delgadillo en Jalisco.

Donde no había ya duda era en Morelos: Margarita González, única mujer que ganó en la encuesta, ya es oficialmente candidata. Es el caso también de Rocío Nahle en Veracruz. En Puebla ganó Alejandro Armenta por más de 10 puntos a Claudia Rivera; Javier May en Tabasco y Joaquín Huacho Díaz en Yucatán, arrasaron.

* La unidad del partido en el gobierno depende ahora de la forma como se procesen las inconformidades. No quieren más historias como las de Marcelo Ebrard o Lucy Meza.

 

El excanciller, por cierto, anuncia el próximo lunes si abandona Morena: la senadora Meza ya es candidata del Frente Amplio al gobierno de Morelos. Sólo dos de los 45 aspirantes derrotados hicieron visible su molestia: el poblano Ignacio Mier y el jalisciense Antonio Pérez Noriega, papá de Checo.

 

 

 

 

 

Mier no estuvo presente para levantar el brazo a su primo, Armenta. Avisó en redes sociales que el domingo definirá su futuro político. Pérez salió enojado del Camino Real. Antes de retirarse declaró: “Dos horas antes (Jorge Emilio González) nos cantó quién iba a ser. A los seis (aspirantes en Jalisco) nos hicieron una gran ofensa. El único que tuvo el valor de salir por esa puerta es tu servidor. No me voy a ningún otro lado, pero esto no se vale”.

* Mueve a risa la forma como la fiscal de la CDMX, Ernestina Godoy, y su vocero, Ulises Lara, descalifican la investigación del NYT que los exhibe como espías. Telcel ya admitió, vía su vocero, Renato Flores, que entregó los datos que requiere la fiscalía por ley. ¿Usted a quien le cree? ¿Al dueto Godoy-Ulises o al NYT y Telcel? Es pregunta. El cotidiano neoyorkino dice que registros judiciales revelan que la Fiscalía de Godoy ordenó a Telcel entregar los registros telefónicos y de texto, así como la ubicación, de una docena de políticos y activistas.

Entre los espiados menciona a Santiago Taboada, alcalde panista en Benito Juárez; la senadora Lilly Téllez, la activista Alessandra Rojo de la Vega; los morenistas mexiquenses Higinio Martínez y Horacio Duarte, entre otros. 

Lilly Téllez reclama que el caso se  investigue  y se castigue a los responsables. “¿Qué podemos esperar de los encargados de procurar justicia  si ellos mismos violan la ley. El NYT tiene pruebas del espionaje. No son rumores ni especulaciones, son  pruebas. No existe motivo, de ninguna índole, para que yo sea objeto de  una investigación. Es abuso de poder”, remató.

* Alguna vez le pedimos a Leonardo Lomelí, rector electo de la UNAM, que definiera la importancia de lo que significa la autonomía para esa casa de estudios: “La autonomía es el oxígeno de la universidad. Sin ella no podríamos ejercer la libertad de enseñar, la libertad de investigar y la libertad de difundir la cultura”, respondió.

En sus primeras declaraciones, ya como rector, dijo que conducirá a la universidad con democracia, prudencia, firmeza y cambio sin estridencia.  Ya encarrerado, manifestó su disposición al diálogo con el gobierno federal. 

La respuesta de AMLO fue la descalificación: “No hay cambio, creo que (Lomelí) era secretario del rector actual (Graue) y (del grupo) de Lorenzo Córdova y Ciro Murayama… Este nuevo rector es del grupo que nunca se opuso a la política económica neoliberal”, dijo en  la mañanera.

Fuentes cercanas al próximo rector reconocen que Lomelí es amigo de los dos exconsejeros electorales, pero que no tienen relación de grupo. “Es el primer rector que fue parte del movimiento estudiantil”, destacan. El propio Lomelí refutó los señalamientos de AMLO en entrevista con López Dóriga: “En modo alguno la UNAM es una institución elitista… en la Facultad de Economía fueron los primeros en prevenir los riesgos del modelo neoliberal desde los años ochenta”.

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