Francisco Garfias
Arsenal
Si algún mensaje fue reiterado en el foro Congresistas de América, donde participaron legisladores de México y EU, fue el que a los gobernantes autoritarios disfrazados de demócratas —Trump y López Obrador fueron muy citados— les estorba la división de poderes. En ese foro digital, organizado por Save Democracy, los legisladores mexicanos de oposición acusaron a la mayoría oficialista en las cámaras de usar el Congreso para debilitar a la SCJN. Le pegan a la Corte por haber anulado decretos y reformas de AMLO. No faltaron las alusiones a la confesada intención de desaparecer al Inai y dejar a los mexicanos en ayuno de transparencia y protección de datos personales.
* El senador Germán Martínez aprovechó su turno para encuerar a los morenistas Alejandro Armenta, presidente de la Mesa Directiva en el Senado, e Ignacio Mier, jefe de la bancada guinda en la Cámara de Diputados. “Ambos —que, para colmo, son primos— le lamen los zapatos al Presidente porque quieren que los designe, porque se elige gobernador en Puebla en 2024”, afirmó. Y fundamentó sus críticas: la mañana del viernes negro Armenta presentó una iniciativa para desaparecer el Inai, tal como lo propone AMLO. Y en estos días Mier anunció, para agosto del 2024, una consulta popular para elegir a los ministros del máximo tribunal en las urnas.
Ya encarrerado, Germán evocó la noche negra del 28 de abril pasado. En esa fecha, AMLO citó a los senadores oficialistas en Palacio Nacional para darle un “golpe” al Congreso.
“Perdónenme el símil, pero es un poco lo que hizo el presidente Trump el 6 de enero de 2021, al intentar tomar el Capitolio. Acá, al contrario, los senadores fueron a Palacio Nacional y hubo un golpe al desaparecer uno de los límites que tiene el poder presidencial en México: el Senado de la República. Al Presidente mexicano no le gustan los límites a su voluntad. Ese viernes 28 de abril cruzó una línea con los senadores que le obedecen. Los llevó a Palacio y les ordenó aprobar 20 leyes. Quería mandar una señal: aquí en Palacio tengo al Congreso mexicano”.
En el foro, conducido conjuntamente por el doctor Edgardo Buscaglia y Marcela Jiménez, participaron el senador Gustavo Madero, Grupo Plural y el senador demócrata Ben Allen. Pero también las diputadas Ivonne Ortega, MC; Cynthia López, PRI —quien prefirió hablar en inglés—; Sonia Murillo, PAN, la excongresista demócrata Donna Christian-Christensen, entre otras.
En su turno, Madero, exjefe nacional del PAN, admitió que los gobiernos de Fox y de Calderón no cumplieron con la democracia. Se quedaron cortos, no satisficieron las expectativas de transformación, dijo. “En el 2018 no sólo ganó AMLO, sino se concluyó un ciclo político en México. Los partidos tradicionales quebraron, se quedaron sin clientela, sin votos, sin legitimidad, sin narrativa y sin liderazgos. La oposición está obligada a construir una opción alternativa, pero ésta tiene que partir de una autocrítica que no ha surgido... No ha habido la humildad, la capacidad, la generosidad de generar esa autocrítica para volvernos a acercar a la población... Tenemos que aceptar nuestros errores y tratar de construir la máxima unidad posible. De cara a 2024, la oposición debe elegir a un solo candidato vía un método de elección distinto. Este método tiene que ser con la ciudadanía, no puede ser cupular”, subrayó.
Y advirtió: las reformas legales, el proceso acelerado de militarización y el ejercicio del gasto social tienen el propósito de que la 4T vaya más allá de 2024.
Ben Allen destacó la importancia de tener controles y equilibrios cuando el Ejecutivo no respeta las normas democráticas. “La presidencia de Trump ha sido una tragedia para mi país, pero también para la democracia. No respetó el resultado legítimo de la elección y se postula de nuevo repitiendo mentiras”.
Ivonne Ortega, difirió de Madero sobre la necesidad de armar gobiernos de coalición para tener un sistema estable.
“Si salimos a la vida pública y le decimos a la gente ‘hay que armar un gobierno de coalición y nos mostramos los mismos que hemos estado en diferentes cargos, ¿qué les estamos comunicando?”, preguntó. Ella misma respondió: “que nos queremos repartir los cargos para que tu sigas igual de pobre…”.
* Nos llegan quejas de “abuso de poder y manipulación de la justicia” por parte de María Fritz, secretaria general de Gobierno en Yucatán. “Ha encarcelado a aquellos que obstaculizan su camino y ha colocado a sus allegados en cargos judiciales de manera inconstitucional”, asegura una fuente confiable. Como ejemplo menciona el caso de la magistrada Lizette Mimenza, alumna de Fritz, quien llegó hace un año al Tribunal Superior de Justicia de Yucatán. “Esas acciones plantean dudas sobre la integridad del sistema judicial en Yucatán”, subrayan.