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Así amanecen los edificios que están a punto de caer en Tijuana

PEDRO DÍAZ | 09:30 hrs.
  
 
Edificios inclinados en el Fraccionamiento La Sierra

Edificios en el Fraccionamiento La Sierra, Tijuana, en peligro de colapso debido a deslizamientos de tierra tras intensas lluvias. Fotografía: @BereniceDiazG

 

En Tijuana, el Fraccionamiento La Sierra es escenario de una situación alarmante. Dos edificios de departamentos en el área están al borde del colapso, debido a los deslizamientos de tierra provocados por las recientes lluvias. Este sábado por la mañana, las torres amanecieron aún más inclinadas, una apuntando hacia el bulevar Cuauhtémoc y la otra hacia la parte frontal del complejo.

Los residentes de los inmuebles en peligro ya han sido evacuados, enfrentándose a un futuro incierto mientras las autoridades locales trabajan en medidas para prevenir un desastre mayor. Los edificios forman parte de un conjunto construido en laderas de la ciudad, algunos de los cuales se encuentran en el bulevar Cuauhtémoc Sur y otros en Playas de Tijuana.

 

En respuesta a la situación, la alcaldesa de Tijuana, Monserrat Caballero, ha informado a través de sus redes sociales sobre el cierre del bulevar Cuauhtémoc Sur. Además, ha anunciado que se proporcionarán rutas alternativas para aquellos ciudadanos que necesiten transitar por la zona afectada. 

Puedes leer: Tijuana espera el desastre; temen efecto dominó por caída de edificios 

La medida precautoria tiene como objetivo proteger a los habitantes de la zona y evitar accidentes. Por su parte, la Policía Municipal está colaborando en la desviación del tráfico hacia el Cañón de la Pedrera, mientras se espera la evaluación de las autoridades competentes.

Lamentablemente, no se puede llevar a cabo una demolición controlada debido a lo inestable e inseguro que resulta ingresar maquinaria pesada en la zona. Las autoridades están trabajando en estrategias alternativas para lidiar con los edificios en riesgo y evitar una tragedia. 

Mientras tanto, los residentes evacuados se enfrentan a un futuro incierto. Muchos de ellos han perdido sus hogares y sus pertenencias, y aún no está claro cuándo podrán regresar a sus viviendas, si es que alguna vez pueden hacerlo.

 

Las autoridades locales han comenzado a investigar las causas de los deslizamientos de tierra y la responsabilidad de las constructoras involucradas en la edificación de estos inmuebles. Se busca determinar si se tomaron las precauciones adecuadas al construir en una zona propensa a deslizamientos y si las regulaciones correspondientes fueron cumplidas.

Este incidente ha generado preocupación entre los habitantes de Tijuana sobre la seguridad y calidad de las construcciones en la ciudad. La situación en el Fraccionamiento La Sierra resalta la importancia de contar con regulaciones de construcción sólidas y de garantizar que los edificios sean seguros y estables, especialmente en áreas propensas a desastres naturales.

Este sábado, el complejo departamental del Fraccionamiento La Sierra muestra una situación aún más preocupante, ya que uno de los edificios ha tomado dirección hacia el bulevar Cuauhtémoc, mientras que el otro se inclina hacia la parte frontal. Desafortunadamente, la realización de una demolición controlada se encuentra imposibilitada debido a la inestabilidad del terreno y al riesgo que representa para el personal el ingreso de cuadrillas y maquinaria. El peso y las vibraciones de la maquinaria podrían causar un colapso y poner en peligro a los trabajadores.

 

 

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Además, hay cuestiones legales que impiden la intervención del Ayuntamiento en la demolición de los edificios, ya que son propiedad privada. Si los dueños no otorgan su consentimiento, podrían demandar al Ayuntamiento por daños a propiedad ajena. Por lo tanto, el Ayuntamiento se encuentra en espera de que la propia naturaleza provoque el derrumbe de los edificios, dejando así al propietario como único responsable.

 

La situación en el Fraccionamiento La Sierra sigue siendo tensa y preocupante. Sin embargo, las autoridades locales están trabajando arduamente para garantizar la seguridad de los ciudadanos y prevenir cualquier desastre potencial en el futuro.