Miércoles, Noviembre 27, 2024
A- A A+

Banner superior a un lado de logo

Ubicacion de Anuncios, debajo de destacados, banner todo ancho

De la O insiste que creceremos entre 2.6 y 3.0%.

Maricarmen Cortés

Desde el piso de remates

 

MARICARMEN CORTÉS

 

En la Reunión Plenaria de Consejeros de Banamex la nota que prevaleció fue la que no se dio a conocer: cuándo se concretará la venta del banco es un proceso que ya lleva más de un año y en el que ya sólo queda como único postor el grupo de Germán Larrea, quien tiene un plazo que vence a fines de este mes para cerrar la operación.

Lo interesante de lo muy poco que se dijo sobre la venta del banco que fuera el número 1 del país es que Ernesto Torres Cantú, director de Citi para América Latina, confirmó que sigue abierta la posibilidad de una oferta pública inicial, lo que muchos interpretaron como una presión a Larrea, quien al parecer pretende bajar el precio de su oferta.

Torres y Manuel Romo, quien seguramente permanecerá al frente de Banamex, se desvivieron en elogios al gobierno por el liderazgo en el manejo de la economía, la conducción responsable de las finanzas públicas, la disciplina fiscal, el respeto a la autonomía del banco central, la apertura al comercio y a la inversión.

Ni una sola queja ni sobre la inseguridad, ni sobre los problemas que están lejos de resolverse con Estados Unidos en el T-MEC en energía y comercio agropecuario ni sobre la falta de certidumbre jurídica para las inversiones, que es la razón principal del bajo crecimiento económico y estancamiento de la inversión privada, que no ha crecido a pesar del atractivo del nearshoring.

Jane Fraser, CEO de Citi, reiteró su confianza en México, pero el hecho es que venderá la banca de consumo y se quedará con la cereza del pastel: la banca de inversión, un negocio en el que gradualmente pierde clientes ante la incertidumbre sobre la venta de Banamex, mientras que otros competidores, especialmente HSBC, ganan mercado.

 

Ramírez de la O, confianza en sus “pronósticos”  

Sin descartar una posible recesión en Estados Unidos y desaceleración por mayores tasas de interés, el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, quien participó en la reunión plenaria de Citibanamex, insistió en su optimista meta de que este año creceremos entre 2.6 y 3.0 por ciento.

Tras resaltar la fortaleza de la economía en 2022, reiteró que es una meta porque “no estamos en el juego de los pronósticos”. Se revisará hasta abril en los Precriterios de Política Económica 2024 y en septiembre con el Paquete Económico 2024.

 

Rodríguez Ceja, autonomía de Banxico

El Premio Naranja Dulce es para la Junta de Gobierno del Banco de México, que encabeza Victoria Rodríguez Ceja, porque en el Informe del IV T de 2020 demostró su autonomía al ajustar a la baja el pronóstico para el PIB en 2023 a 1.6%, en una abierta discrepancia con el optimismo del secretario de Hacienda.

 

Torruco: optimismo sobre Sedena Airlines

El Premio Limón Agrio es para el secretario de Turismo, Miguel Torruco, porque aseguró que cuando inicie operaciones la aerolínea de Sedena, que está en trámites de adquirir la marca Mexicana de Aviación, bajarán las tarifas en vuelos domésticos.

Se entiende que Torruco quiera quedar bien con su jefe, pero para que Sedena Airlines influya en precios de vuelos domésticos, tendría que tener una flota y rutas competitivas.

El riesgo es que opere sin transparencia, con subsidios y genere una competencia desleal bajando precios en las pocas rutas en las que inicie con operaciones.