Leo Zuckermann
Juegos de poder
En este espacio he reiterado mi preocupación de que López Obrador desconozca un posible triunfo opositor en las elecciones de 2024 y se niegue a entregar la Presidencia al legítimo ganador en las urnas. Para López Obrador es inconcebible que Morena pueda perder el año que entra. Nunca en su historia ha aceptado una derrota y no va a comenzar a hacerlo en 2024. Fiel a su estilo, argumentará que los resultados adversos fueron producto de un fraude promovido y avalado por las autoridades electorales. Tal y como Trump en Estados Unidos y Bolsonaro en Brasil, hará hasta lo indecible con tal de no entregar el poder a la oposición.