Jueves, Noviembre 28, 2024
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En riesgo pago por seguro del Metro

Adrián RuedaAdrián Rueda                       

Capital político

 
Un reciente texto del periodista Raymundo Riva Palacio pone en la palestra del tema del Metro un asunto extra: si los últimos incidentes atípicos fueron por “sabotaje”, ¿quién pagará los millonarios daños al STC?

Y es que la jefa de Gobierno ha venido diciendo que estos incidentes son parte de una campaña en la que participan trabajadores sindicalizados y partidos políticos para desprestigiarla rumbo a las elecciones de 2024.

Después de acusar, primero al Sindicato, en la última semana cambió su discurso y aseguró que se trata de acciones del crimen organizado, que se dedica a robar el cableado de cobre del sistema, de alto valor en el mercado negro. 

La cosa es que si fue por “sabotaje” la tragedia de la Línea 3 del Metro, donde una joven de 18 años falleció y decenas de usuarios resultaron heridos, ¿entonces por qué corrieron al subdirector de Operaciones y por qué están culpando al conductor del tren siniestrado?

El intento de crear una narrativa de que el principal sistema de transporte de la CDMX está siendo atacado por manos terroristas deja preocupados a todos los usuarios, pues quiere decir que no hay garantía de que lleguen bien a sus respectivos destinos.

Y, en este contexto, el apunte de Riva Palacio alerta que las cláusulas del millonario seguro contra accidentes contratado por el Metro cubre muchísimas cosas, menos dos fundamentales: no incluye sabotaje ni terrorismo como causales de demanda.

Si el gobierno capitalino ya interpuso denuncias ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México por presuntos actos de sabotaje y robo de cableado por parte de bandas criminales, como probables causantes de los “incidentes atípicos”, ¿cómo exigirá la cobertura de daños?

 

 
 
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Con su discurso, el gobierno busca librar su responsabilidad política, pero, al mismo tiempo, le da la salida a la aseguradora —que, según el periodista, recibió una prima de 504 millones de pesos— para que no pague nada.

O sea, si la propia autoridad denuncia que el alcance entre trenes ocurrido entre las estaciones Potrero-La Raza el 7 de enero pasado se debió a sabotaje, no tiene derecho a reclamar los 800 millones de pesos que el seguro cubre por colisión y descarrilamiento, por ejemplo.

Tampoco a reclamar los dos millones de pesos por la joven fallecida ni el millón de pesos por persona en gastos médicos. Si no fue falla del Metro, la aseguradora no está obligada a pagar un solo centavo… Lo harán los contribuyentes.

Y lo dicho, si no fue culpa del Metro, entonces porque al día siguiente de la tragedia cesaron a Alberto García Lucio como subdirector de Operaciones y, posteriormente, demandaron por homicidio culposo al conductor del tren.

 

CENTAVITOS

Y en más temas judiciales, no se entiende que al desaparecido Rafael Gómez Cruz lo separaran de la Seduvi apenas fue demandado por abuso sexual. Que a Renato Molina lo corrieran de la Dirección de Regularización Territorial por una demanda similar, pero que el consejero jurídico de la CDMX, Néstor Vargas Solano, siga tan campante tras la denuncia penal CI-FIDS/FDS-6/UI-FDS-6-01/01880/11-2022, interpuesta en su contra en la Fiscalía de Investigación de Delitos Sexuales. Ernestina Godoy, “la mejor fiscal de México”, tendrá que explicar a las mujeres que constantemente se manifiestan por las agresiones de que son objeto y, en este caso, por parte de altos funcionarios de un gobierno de la 4T, que no puede tratar a todos por igual, pues hasta entre los morenos hay razas.