COLUMNA POLÍTICA “ROMPIENDO EL SILENCIO”
<< Que Heriberto Galindo armó el tinglado contra Gerardo Vargas
Por: Álvaro Aragón Ayala
Somos libres como el viento. Ocho años de guerra sucia. Ocho contra Héctor Melesio Cuén Ojeda y uno ya contra Proyecto 3 porque los colaboradores o directivos del semanario no tocan en la orquesta o campaña de desprestigio contra el ex rector de la UAS y diputado local. No hay duda que el no participar en la batalla de linchamiento contra el personaje fundador del Partido Sinaloense es Delito de Lesa Periodismo para “Los Exquisitos”. Ocho años de guerra sucia ¿No cree usted estimado lector que quienes arman y sacan la cara en el golpeteo contra Cuén Ojeda deberían ser sometidos ya a una rigurosa atención siquiátrica? Sinaloa es territorio ya de Proyecto 3. El semanario llegó para quedarse. Cuando el grupo de periodistas que usted puede leer en estas páginas decidimos lanzar el semanario optamos por ofrecer a los sinaloenses un contenido diferente. Nuevo.
<< Que Heriberto Galindo armó el tinglado contra Gerardo Vargas
Por: Álvaro Aragón Ayala
Somos libres como el viento. Ocho años de guerra sucia. Ocho contra Héctor Melesio Cuén Ojeda y uno ya contra Proyecto 3 porque los colaboradores o directivos del semanario no tocan en la orquesta o campaña de desprestigio contra el ex rector de la UAS y diputado local. No hay duda que el no participar en la batalla de linchamiento contra el personaje fundador del Partido Sinaloense es Delito de Lesa Periodismo para “Los Exquisitos”. Ocho años de guerra sucia ¿No cree usted estimado lector que quienes arman y sacan la cara en el golpeteo contra Cuén Ojeda deberían ser sometidos ya a una rigurosa atención siquiátrica? Sinaloa es territorio ya de Proyecto 3. El semanario llegó para quedarse. Cuando el grupo de periodistas que usted puede leer en estas páginas decidimos lanzar el semanario optamos por ofrecer a los sinaloenses un contenido diferente. Nuevo.
De avanzada. Instalar, desde nuestra óptica, a los actores políticos y funcionarios de gobierno en su justa dimensión. Nos movió el espíritu de idoneidad. El debatir y competir en buena lid profesional con periodistas de la talla de Martín Mendoza, Fernando Zepeda, Tomás Chávez Salomón, Héctor Ponce, Benjamín Bojórquez (+), y otros más de El Debate, a fin de ofrecer a los lectores sinaloenses nuevas aristas informativas y de análisis. Nos motivó el discutir y participar en la mesa del análisis periodístico, juicioso y sereno, con Rodolfo Díaz Fonseca, Guillermo Fárber, Antonio Quevedo Susunaga, y otros articulistas de Noroeste y contribuir a enriquecer, con opiniones sustentadas, el trabajo del equipo de colaboradores – Mario Montijo, Juan Manuel Partida, Víctor Torres, Armando Ojeda, entre otros- de Eduardo Valdez Verde, director del Sol de Sinaloa, para en conjunto, con una amalgama de información de primer nivel, con el aporte de datos de varias corrientes periodísticas, los lectores, la sociedad, creara sus propios juicios y tomara sus decisiones. Optamos por ejercer un periodismo de alto impacto. Por aquellos días –ya estamos por cumplir dos años – en las esferas de la opinión pública ya hacia ruido maquiavélico el “Grupo de los Exquisitos”, integrado por personajes que se creen Dueños Absolutos de la Verdad. Asesores políticos, orientadores, consejeros –uno electoral, incluso-, que alardeando “doctorados complutenses”, con disfraz de periodistas, lo mismo se movían y se mueven en el universo político y electoral, ejerciendo “presión pública” contra quien piense o actúe diferente a ellos o se desplace en sentido contrario a sus intereses personales. Decidimos no tomar en cuenta a este grupo. A nuestro juicio sus comentarios no eran ni son, carecen, pues, de valor, para normar un razonamiento vertical. De altura. Determinamos que usaban y usan el periodismo cómo su escudo y punta de lanza, en un ejercicio perverso o modus vivendi extracurricular. Ciertamente, “Los Exquisitos” – el ex Consejero Estatal Electoral, Ernesto Hernández Norzagaray, es miembro plenipotenciario de ese grupo-, habían logrado que sus comentarios, artículos, “análisis”, descalificaciones, tuvieran mínima credibilidad en su campo de acción: la UAS, el Consejo Estatal Electoral (hoy INE u Ople), los partidos políticos, el Congreso Local y gobierno estatal y los ayuntamientos. Rehenes de sus escritos lo eran los lectores esponjas, que no tenía otra opción más que leerlos pese a su operar de mafia periodística y a su bregar como inquisidores: eran y son acusadores directos, muy a su modo agentes del Ministerio Público Periodísticos y Jueces Populares. Un todo para completar la Verdad Absoluta. Su verdad (En Noroeste usted puede ver o leer siempre patinar sobre el mismo tema, machacar hasta el enfado, a Arturo Santamaría, otro más de los brillantemente ilustrados). Omnipresente, el “Grupo de los Exquisitos”, en demérito del periodismo, actuaba y sigue actuando, entonces, en concurso, sincronizado, para destruir honras privadas y públicas. Así, al ofrecer un contenido diferente, mantener una línea editorial independiente a sus intereses, al no opinar “exquisitamente”, al no alinear los comentarios a los de ese grupo, al no aplaudir sus “análisis”, al publicar artículos, columnas, diagnósticos, que superan en contenido a los suyos en seriedad y profesionalismo, Proyecto 3 pasó a ser parte de la “agenda perversa” de Ernesto Hernández Norzagaray y compañía. Enloquecieron, sí, de plano, al ser reducidos prácticamente a la nada, desnudados, exhibidos, ante los lectores sinaloense. Pero la rabia de “Los Exquisitos” no radica nada más en que la sociedad sepa ya que son mentirosos, difamadores, calumniadores y perversos. Su mayor cólera con Proyecto 3 es que abrió sus páginas a las posiciones políticas de Héctor Melesio Cuén Ojeda y le otorgó, en el contexto periodístico, valor real, serio, profesional, a su trabajo político, social y electoral. La posición del semanario chocó de inmediato con los intereses políticos y personales de Hernández Norzagaray y sus “alineados” en la campaña de linchamiento contra Cuén. Ciertamente. En Proyecto 3 le damos juego periodístico a Héctor Melesio Cuén porque representa el liderazgo de la tercera fuerza política de Sinaloa. Porque personifica o encarna las aspiraciones de miles y miles de ciudadanos que constituidos en un Partido Político participan ya en la vida política y social de Sinaloa. En los trabajos periodísticos de Proyecto 3 en que se menciona a Héctor Melesio Cuén no va impreso ningún el sello, ni publicitario ni propagandístico. Se le incluye en trabajos periodísticos serios que lo ubican en su justa dimensión política, social y electoral. Nada más. Vaya: dado entonces el trabajo periodístico no acorde a sus intereses y odios personales, Norzagaray y sus socios han encaminado una campaña para “vincular” a Cuén con Proyecto 3 ¿Por qué contra el ex rector de la UAS y el semanario? Contra Cuén porque lo culpan de perder espacios de poder en la universidad y contra Proyecto 3 porque los atomizó y porque demostró a la sociedad que lo que ellos practican no es periodismo, sino basura, ejercicios propagandísticos para el desquite, para la venganza, para cuajar negocios a traspatio traicionando la confianza de los editores. Sí. En Proyecto 3 asumimos la responsabilidad periodística e histórica que enloquece a “Los Exquisitos”: Ubicar en su justa dimensión política, social y electoral a Héctor Melesio Cuén Ojeda, sin quitarle ni ponerle (diría el periodista Osvaldo Villaseñor, que nos ha distinguido también con sus colaboraciones). La guerra sucia no nos asusta ni nos intimida. Nadie nos va a callar. Ernesto Hernández reducido ya a la nada, desprestigiando a los medios que le abren sus páginas, volvió pues a la carga con otra sandez que lo pinta de cuerpo entero: descalificar el trabajo periodístico que desarrolla El Debate, Proyecto 3 y otros medios, en torno al perfil – pasado, presente, ambiciones y corrupciones- de figuras políticas metidos en la competencia por la candidatura del PRI al gobierno de Sinaloa, intentando protegerlos de la auscultación pública-periodística, de la investigación informativa. El ex integrante del Consejo Estatal Electoral –al servicio primero de Juan Millán y luego de Jesús Aguilar Padilla, por ocasión también brazo derecho de Rigoberto Ocampo Alcántar, escribió un artículo mafufo titulado Guerra Sucia, en el que se eleva en Defensor de Oficio de políticos del PRI. En uno de sus párrafos destaca que “Heriberto Galindo (al que le ha concedido ya Dotes de Estadista) ha recibido varios ataques desde el diario digital Proyecto 3, vinculado al diputado Héctor Melesio Cuén, acusándolo prácticamente hasta de que haya nacido en Guamúchil o estar en compañía de Ruiz Massieu el día en que fue acribillado”. La verdad Proyecto 3 en su edición impresa y digital ha desnudado y seguirá desnudado a Heriberto y señalando sus tropelías ¿Qué tan sórdidas y tan sólidas serán las complicidades de Heriberto y Hernández Norzagaray? Heriberto no se cuece en el primer hervor: El güerito al que le quedó debiendo millones de dólares se los cobró quitándole el rancho, reses y otras propiedades. El ganado pura sangre fue comprado por la hermanos Rubio Ayala, que conste. Que quede claro: No ha sido el semanario quien tiró la primera piedra; fueron “Los Exquisitos”, quienes al ver amenazados sus intereses y sumirse en el descrédito público, empezaron a intentar politizar y erosionar nuestro trabajo periodístico. Proyecto 3 comete también el delito de Lesa Periodismo porque denuncia y crítica a Heriberto Galindo, uno de los favoritos de Hernández Norzagaray ¡valga sea la parte: por temor a perder espacios periodísticos sus otros dos candidatos son Heriberto Félix Guerra y Manuel Clouthier Carrillo, uno de los dueños de Noroeste! El ex Consejero Electoral se volvió entonces a poner exquisito. Lo escribimos: es tan la ciega la soberbia de este espécimen que, al final del día, cae en aquella figura literaria que tan bien retrató Jorge Ibargüengoitia: El pavorreal, entre más se esfuerza por desplegar y presumir su bello plumaje, más enseña el ano. Y vaya que lo mostró de nuevo. Sí, en ese escaparate de falso Dueño de la Verdad evidenció el cobre, elevándose olímpicamente en defensor de oficio de la millonaria Diva Hadamira Gastélum Bajo y de Aarón Irízar contra “los ataques” de El Debate. Erigiéndose en salvaguarda, también, de la imagen de Sergio Torres, alcalde de Culiacán, porque “no le ha ido mejor con la resolución de los magistrados del Tribunal de lo Contencioso Administrativo, donde estos solicitan juicio político para el alcalde culichi”. Claro. Desliza una sospecha: en lo que él califica de guerra sucia, dice “muchos intuyen que los ataques que reciben es ‘fuego amigo´ que baja desde el tercer piso del Palacio de Gobierno. Más específicamente, desde la oficina de Gerardo Vargas, el secretario de Gobierno”. La realidad rebasa el drama: intenta “vincular” a Gerardo Vargas en su guerra cayendo en las paradojas de las guerritas. Pero si se “vincula” a Ernesto Hernández Norzagaray con “su estadista” Heriberto Galindo Quiñones ¿Sería entonces él quien armó el tinglado para atacar a Proyecto 3, El Debate, Landeros y Cuén, y buscar así un blindaje político para el ex diputado aspirante a candidato del PRI? Se antoja un tanto descabellado que por sus “vínculos” con Manuel Clouthier Carrillo, el ex Consejero Estatal Electoral se haya echado a cuestas la defensa de personajes políticos del PRI tradicionalmente en oposición a las posturas y proyectos periodísticos de Noroeste. La conclusión es que la verdadera guerra sucia la realizan “Los Exquisitos”, contra todo el que opine diferente o haga un trabajo periodístico que no se ajuste a sus intereses. Los medios de comunicación de Sinaloa cumplen con revelar antecedentes, perfiles y hasta riquezas acumuladas por políticos aspirantes a la candidatura tricolor. Ocho años de guerra sucia contra Héctor Melesio Cuén y uno contra Proyecto 3 y ahora participando, estructurando, la guerra sucia contra Gerardo Vargas ¿son o no suficientes para encerrar en el manicomio a Hernández Norzagaray? Proyecto 3 es independiente. Nadie nos va a doblar ni callar…Somos libres como el viento.