Seguramente el alcalde de Guasave, Armando Leyson Castro jamás imaginó que a poco menos de dos años de su segunda experiencia como presidente municipal su administración iba a ser calificada como la peor en la historia política de Guasave. Y que conste. En la memoria política de los guasavenses aún están vivos los recuerdos nada favorables para más de alguna de las administraciones que han encabezado “connotados” priistas.
Y mire que ya es mucho decir. Pero el juicio lapidario de la ciudadanía sobre el actual régimen ya fue emitido. “Este es el peor de la historia política de Guasave”. Y es que el pueblo de Guasave mira con desánimo y frustración a un alcalde pasmado que no atina a articular alguna estrategia que le permita, al menos, salvar lo poco que le pudiera quedar de su capital político. Porque una cosa debe quedar perfectamente clara y eso lo debe saber el alcalde. Las figuras públicas con el ejercicio del poder llegan a un punto de desgaste que cuando se dan cuenta de ello ya es demasiado tarde; y ese parece ser el caso de Armando Leyson quien parece no entender que no basta con “lloriqueos” y ridículos juegos de palabras como ese de que a las finanzas públicas les pegó el chinkunguya. O que a las finanzas les hace falta un tanque de oxígeno de cien millones de pesos para medio salir de sus broncas. Pero mientras el alcalde tiene convertido el edificio de la presidencia municipal en un verdadero “Muro de las Lamentaciones”, la ciudadanía ya no encuentra a que santo encomendarse para que por lo menos le retiren el mar de inmundicia en que viven como consecuencia de que la recolección de basura y desperdicios no tiene para cuando normalizarse, pues la deuda que mantiene la administración municipal con la Promotora Ambiental, S. A., ya superó los treinta millones de pesos y no se ve para cuando el Ayuntamiento pueda ponerse al corriente con los pagos. Pero no vaya usted a pensar que éstos son los únicos problemas que tiene el Ayuntamiento de Guasave. No, para nada. Ahí está latente el problema del adeudo millonarios con los trabajadores sindicalizados, quienes por voz de su dirigente, Alejandro Pimentel lanzaron un ultimátum a la autoridad municipal advirtiéndole que no habrá ninguna prórroga para el estallamiento de la huelga, luego del emplazamiento hecho en contra de la parte patronal. En iguales o peores circunstancias se encuentran los trabajadores de la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guasave. Ni que decir de los síndicos municipales quienes han denunciado que desde hace más de ocho meses no reciben la dotación de combustible a que tienen derecho para poder prestar los servicios públicos, como la vigilancia y otros a la ciudadanía. Además, como es de esperarse no les reembolsan los recursos económicos que destinan para medio dar la cara por sus representados. Y de los regidores, mejor no hablamos, pues pese a que también se quejan de que no les pagan, ninguno se atreve a dar la cara y prefieren su zona de confort, que sacar la casta por la ciudadanía. O tú como la ves, compañero Carlos Leyva. Y pensar que todavía se quejan de los señalamientos mediáticos de que son objeto, tratando de quitarse la “sapeta” a patadas bajo el insostenible argumento de que se trata de “cuestiones políticas”, como lo afirma el ahora líder patito del Partido Acción Nacional en Guasave, Noé Molina Ortíz. Como usted podrá darse cuenta, estimado lector, la situación no podría estar peor hacia el interior del Ayuntamiento de Guasave, por lo que no nos queda mas que solidarizarnos con lo expresado por nuestro amigo Víctor Espinoza Bojórquez quien señalara que la actual administración no tiene rumbo, ni pies ni cabeza. ALCALDE VALIENTE. Nadie podrá negar que el alcalde de El Fuerte Vinicio Galaviz es un presidente municipal que se anima a poner en juego todo su capital político, cuando de dar la cara por sus gobernados se trata. Y es que solamente alguien que deja de lado la eventualidad de seguir adelante con su carrera política, o de plano un loco, como el mismo lo afirma, se atreve a ponerse con Sansón a las patadas, como ocurre con el actual diferendo que sostiene el alcalde del alteño municipio con la Comisión Federal de Electricidad. Y es que Vinicio Galaviz, asegura que está dispuesto a llevar hasta sus últimas consecuencias la exigencia de que la CFE pague el impuesto predial al municipio de las termoeléctrica y del resto de las instalaciones que tiene en su jurisdicción, como única opción para que la Junta de Agua Potable de El fuerte, pueda cubrir los ocho millones de pesos que le adeuda a la dependencia federal por concepto de energía eléctrica. Por lo pronto, el alcalde ya logró que el Congreso del Estado incluyera un punto de acuerdo sobre su petición. El siguiente paso, sería, según sus propias palabras, acudir ante el Congreso de la Unión para llevar su planteamiento ante la más alta tribuna del país. Incluso, de ser necesario, dice estar dispuesto a elevar su petición de justicia ante la propia Organización de las Naciones Unidas. Cuestionado sobre si no tiene temor de que se le finque alguna responsabilidad por atreverse a plantear tal petición, que dicho sea de paso, no tiene precedente en nuestro país, el ejecutivo municipal sostiene que lo más que le puede pasar es que lo congelen políticamente y ello lo tiene sin cuidado pues asegura que prefiere luchar por lo que considera justo a permanecer de brazos cruzados sin preocuparse por los problemas de sus gobernados. LA MEGAFIESTA DE LINDOLFO. Desde éste espacio enviamos nuestra felicitación a nuestro amigo Lindolfo Barajas por su reciente cumpleaños el cual fue festejado por su hijo Ramón. Por cierto que nos reporta nuestro enviado especial al rumboso sarao que aunque el diputado Barajas quiso colgarse del evento para relanzarse políticamente, lo cierto es que la asistencia al festejo estuvo muy de medio pelo. Y es que las grandes estrellas del firmamento político como Gerardo Vargas Landeros, Daniel Amador y Diva, entre muchos otros, decidieron declinar la invitación del legislador. Incluso sus compañeros de curul en el Congreso del Estado podían contarse con los dedos de una mano y sobraban dedos. Por lo demás, la comida y la música estuvieron a la altura y merecimientos de nuestro amigo LINDOLFO.
Hasta aquí la dejamos por ahora. Le recordamos que también nos encuentra en el portal asieslapolitica.com en nuestro blog politicay algomas.com y en Facebook. La frase de la semana: ALGO NOS FALLO EN LA LOGISTICA DE LA FIESTA. La pronunció nuestro amigo Manuel Zambada Coronel, quien estuvo a cargo del magno evento.