Por Jesús Alberto Rubio.
1.- Desde que se implementó el sistema de divisiones y playoffs en 1969 apenas 12 equipos con el mejor récord durante la campaña regular han llegado a ganar la Serie Mundial. Vaya a mi @beisrubio y verá.
2.- El venezolano Germán Márquez (Rockies) igualó un récord de la era moderna (desde 1900) en la Gran Carpa al abanicar a los primeros ocho bateadores de Filadelfia que enfrentó. Además, el derecho superó la marca de ponches para una temporada en la historia del equipo de 214 que el dominicano Ubaldo Jiménez había establecido en el 2010.
3.- Roberto Riveros: Frank Chance fue electo al Salón de la Fama en 1946. Él llevó a los Cachorros a ganar la Serie Mundial en 1907 y 1908. En 1906 impuso una marca de más triunfos (116), en una temporada de 154 juegos. Los Marineros igualaron el récord en 2001, pero en 162 juegos. ¡Bien, colega!
4.- Cuando los Indios de Cleveland, dirigidos por Al López establecieron en 1954 el record de 111 victorias (111-43) en temporada (Liga Americana), fueron a la serie mundial ante los Gigantes de Nueva York y ya sabe lo que sucedió: ¡cayeron barridos en cuatro!
Ocurrió en el año en que Beto Ávila conquistó el título de bateo (.341) para los aborígenes, algo que nunca más se ha visto en un pelotero nativo de México (sí, sí, ¡del bello puerto jarocho, paisanos!).
Le cuento aquel capítulo, así de manera muy puntual:
Exacto, la historia nos cuenta aquel suceso inolvidable y por ello vale la pena rescatarlo:
Además de lo que hizo Beto Ávila con su bat, Cleveland traía a Larry Doby, campeón de jonrones con 32 y de carreras impulsadas con 126.
También el cuarto bate y tercera base Al Rosen presentaba promedio de .300, con 24 jonrones y 102 carreras impulsadas.
Y su pitcheo, encabezado por Bob Lemon, era formidable (23-7,) seguido de Early Wynn (23-11), Mike García (19-8), Art Houtteman (15-7) y Bob Feller (13-3).
Obviamente eran ampliamente favoritos para ganar la Serie Mundial.
Los Gigantes de NY tenían entre sus filas al campeón de bateo de la Liga Nacional: Willie Mays (.345).
Se esperaba un gran duelo otoñal y que, claro, especialmente los expertos de la bolita mágica, de manera muy objetiva pronosticaban que Cleveland tenía todo para coronarse.
Sin embargo, no fue así para sorpresa de todos.
Y es que desde el primer juego, cuando Mays realizó enorme atrapada al fondo del jardín central del Polo Grounds a batazo de Vic Wertz –engarce catalogado como una de las más recordadas en los clásicos otoñales—comenzó a cambiar la historia en contra de Cleveland.
Y fíjese qué curioso: tanto Beto Ávila como Willie Mays tuvieron una Serie Mundial para el olvido, que mejor ni contarle.
Fue la última Serie Mundial en el Polo Grounds ya que tres años después, tras la temporada 1957 los Gigantes se mudaron a San Francisco, siguiendo el camino de los Dodgers de Brooklyn.
A 4 JONRONES
Los NYY llegaron a 260 jonrones en campaña e igualaron a los Rangers de Texas de 2005 con la segunda máxima cifra en la historia de MLB.
Ahora están a cuatro detrás de los Marineros de Seattle de 1997.
Para llegar a los 260 contó con los bambinazos de Giancarlo Stanton, con dos (37); Luke Voit (13) y de Miguel Ándújar (27).
Voit “se fue” de 3-23 y ahora promedia .319.
Ah, CC Sabatia consiguió su victoria 246 en su formidable trayectoria.
SULTANES
Gran fiesta y júbilo en Monterrey porque sus Sultanes se han coronado bicampeones de la Zona Norte de la LMB al eliminar en cinco juegos a Monclova que por su gran pitcheo y gran temporada para muchos expertos era el gran favorito de avanzar a la final, pero ya vio (remember Cleveland Indians, 1954, precisamente).
Los Acereros fueron los súper líderes (40-14) en el rol regular del segundo torneo del circuito y mire qué drástica y dramática caída tuvieron ante los Regios.
Ahora los Sultanes están a la espera del ganador entre los equipos hermanos, Diablos Rojos de México y Guerreros de Oaxaca.
Ya veremos, amigos.