• Ver al cubano Aroldis Chapman perder una ventaja de tres carreras no es común. El hecho sucedió en histórico y maratónico partido del domingo cuando salió con ventaja de 4-1 en el cierre del noveno… ¡y a las regaderas con el empate encima!
• En la siguiente columna volveré a abordar el tema de la falta seguridad social del pelotero profesional mexicano. Incluso, de la falta de respuesta –unión/convicción-- del propio protagonista que vive en su “zona de confort” sin pensar en el mañana.
Por Jesús Alberto Rubio.
Por algo o por mucho, el beisbol es ¡beisbol!
Indudable: total disfrute ver un juego… ¡de 18 entradas que se extendió por más de 6:05 horas en el que se estableció un record de ¡48 ponches!
Sí, amigos/colegas; el partido de interligas más largo en innings de la historia de las Mayores… y de esta temporada, qué cosa.
Un partidazo de principio a fin que terminó, aquí pasaditas las once de la noche, en Chicago, poquito más allá de la una de la madrugada.
Aguantarlo… ¡qué amor al beisbol!
Juegazo entre el campeón 2016… y los NYY, lo cual lo dice todo.
A ver:
Con empate a 4, Aaron Hicks, abrió la tanda ante Pedro Strop (0-2) con toque sorpresivo frente al catcher Willson Contreras, quien tiró mal a primera ¡y vámonos a segunda! Y ya se imaginará la tensión en el Wrigley Field entre los pocos aficionados que aún quedaban.
Enseguida, la jugada obligada –de librito—: Jacoby cumplió la orden de Joe Girardi y con toque de sacrificó envió a Hicks a la esquina caliente. Madre santa.
El drama continuó cuando Starlin Castro dio rodado ligeramente a la izquierda del short Addison Rusell, quien atrapó no sin cierta dificultad, pero al quedar mal parado, tiró abierto-desviado al plato y Hicks, barriéndose como un bólido, o sea a todo lo que da, anotó la carrera que a la postre sería la diferencia.
¡Qué triunfo y con ello, la barrida a los Cubs!
Marca de ponches
Ahora, vámonos a la historia del maratónico juego en el que ambos equipos pusieron un récord de Grandes Ligas con los citados 48 ponches. (El registro anterior era de 43, impuesta el 9 de julio de 1971 entre Angelinos y Atléticos).
En el caso de los abridores, Luis Severino y Jon Lester, poncharon a nueve bateadores cada quien. Cada uno abanicó a por lo menos un oponente.
Los NYY establecieron marcas de franquicia para K, tanto de parte de sus pitchers (26) como de sus bateadores (22). También contaron con siete lanzadores que abanicaron a dos bateadores o más, también un récord en MLB.
Por su parte, Chicago impuso récords del equipo al poncharse 26 veces. Los 22 "chocolates" propinados a sus bateadores fueron la segunda mayor cantidad en la historia de la franquicia.
Su récord de ponches recibidos es de 24, el 15 de mayo del 2003 en un partido de 17 innings en Milwaukee.
La marca anterior de ponches en el Wrigley Field era de 37, impuesta el 31 de mayo del 2003 en un juego contra los Astros.
Severino-Lester-Chapman
El ganador del juego: Chasen Shreve (1-0), quien lanzó tres innings en blanco y al cierre del 18, ponchó al bateador emergente Kyle Hendricks con corredores en primera y segunda para el último out, en la quinta victoria seguida de NY.
Por su parte, Severino tiró siete entradas para 4 H y 9 K; Lester, igual número de episodios, con 3 H y también 9 abanicados. O sea, trabajos de alta calidad y efectividad.
Chapman, en 2/3, no pudo lograr el octavo rescate: 3 H, 3 C, con 2K y 2B. Antes, Betances tiró la entrada ocho con un hit, una base y un K. Por los Cachorros, en sus relevos lucieron perfectos Wade Davis y Carl Edwards Jr., ambos con 3 K; y Koji Uehara (1K).
Bellinger & Alonso
Ahora vayamos a los Jugadores de la Semana en el viejo y el nuevo circuito de la Gran Carpa:
1.- Cody Bellinger, (primera base y jardinero de Dodgers): apantalló con tres jonrones y empujó nueve carreras en cinco juegos, tres de ellos en victorias sobre los Gigantes y Padres.
Tuvo cuatro juegos con más de un hit y tras irse de 21-9 en la semana ahora tiene promedio de bateo de .357. Cinco de sus nueve inatrapables fueron extrabases.
El 1ro de mayo pegó un doble y al día siguiente un triple ante los Gigantes. Más adelante, conectó un par de jonrones el viernes contra San Diego. Luego coronó su semana el sábado por la noche conectando un grand slam.
2.- Yonder Alonso, primera base de Oakland: cinco jonrones y 10 impulsadas en un período de seis juegos. El cubano dejó una línea ofensiva de .409, y pegó dos imparables o más en cuatro de sus seis compromisos.
Alonso tiene ahora nueve jonrones en campaña, con lo que ya igualó su marca personal en una temporada durante sus ocho años en las Mayores. El cubano batea para .311 con 24 empujadas en esta temporada.
Bien.