A ver: Ya abordé hace dos días el siguiente tema en Facebook: los logos publicitarios en los uniformes de los peloteros y la forma en que “en un descuido “se pudieran invertir las cosas”.¿De qué se trata? Que el nombre oficial de la franquicia quede debajo de una firma comercial.Así de fácil.
Ya en uniformes de algunos equipos –como el de los Venados de Mazatlán—se ve que lucen más los parches publicitarios que el nombre de la franquicia.“¡No des ideas!”, me dijo mi compadre Paco Martínez.
Y es que los afanes mercantiles --“negocios son negocios” permean hoy en los jerseys de la pelota profesional con el argumento/justificación de que a través de esos parches entra dinero importante para el sostenimiento del equipo…. Aunque el pelotero no obtenga porcentaje alguno de esa ganancia.
Este tema lo compartí en esa red como una crítica sarcástica tras mover, aprovechando la nueva tecnología de Internet, la posición de los logos de la empresa y la firma de casa (franquicia).¿Cómo la ve?
Inmortales del béisbol cubano
Felicidades: una nueva obra (libro) del profesor Juan Antonio Martínez de Osaba de Goenaga se presentará en el Pabellón Cuba de La Rampa, La Habana, el próximo 18 de febrero, a las 2 pm.
En el mismo se recoge la vida y obra de los jugadores nativos que han sido exaltados al Salón de la Fama del Béisbol Cubano, incluido el Salón de Cooperstown.
Así podrán apreciar las leyendas de Martín Dihigo, Conrado Marrero, Omar Linares, José de la Caridad Méndez, Bebé Royer, Orestes Miñoso, Luis Giraldo Casanova, Esteban Bellán, Camilo Pascual, Amado Maestri, Felo Ramírez, Braudilio Vinent, Tany Pérez, Cristóbal Torriente, Orestes Kindelán, Alejandro Oms, Antonio Muñoz, y tantos otros, incluidos federativos y árbitros, que harán las delicias de los lectores.
Excelentísimo, colega.
Juan Antonio es escritor, promotor cultural, crítico, ensayista. Profesor Titular y Consultante Universitario de la Facultad de Cultura Física y Deportes de Pinar del Río y una experiencia de 35 años en labores investigativas y pedagógicas en la Universidad del Deporte Cubano.
MI SANGRE: Gusto en saludarte y te comento, sobre todo con el debido respeto que se merece Bernabé López Padilla, pero debo decirte que Sergio “Kaliman” Robles lo que menos tenía era miedo y en aquellos ni en estos tiempos ningún manager saldría a llamar la atención a uno de sus jugadores.
Se lo comenté a Kaliman y me contestó rotundamente que eso nunca sucedió en su carrera dentro del béisbol.
Dijo que siempre se fajó para lo que fuera y que en esa ocasión le grito a Steve Garvey que cortara pues ya no lo sacaban y me dice que en efecto, Pete Rose era un monstruo tumba catchers y que él (Kaliman) tenía la experiencia para ese tipo de jugadores y que fácilmente los tocaba como torero o bien plantado en home.
Bien, Mi Sangre.
CESÁREO SUÁREZ NARANJO:
Amigo: ¡muy, muy cierto, lo que dice Bernabé López Padilla, acerca de que "no fue Kaliman Robles el primero que se le emparejaba al bateador/corredor, cuando este último iba hacia la primera".
Debo recordar que soy, beisbolisticamente hablando, de la década de los cuarentas; pero, un poquito más para acá, a principios de los años 50´s, casi todos los cuatro equipos que me tocó ver en la temporada 1951/52: Toro Acosta y Paco Loco Delgado con XALAPA; Mario García Domingo con Orizaba; Lauro Pascual y Frank Casanova con Cafeteros; y, principalmente, el cubano Modesto Pérez y el "güerito" Luis Villanueva, por mis Cañeros de Cosamaloapan, corrían a la par con el que iba de jom a primera. Lo digo, sin tratar de demeritar lo que hacía Sergio.
E, incluso, en el beisbol local, nos inculcaban que jugando la posición que fuese, y aun sin tener jugada directa, deberíamos tratar de asistir, en caso de un mal tiro.
Bien.
Cesáreo también hizo referencia a lo que le comentó Enrique Kerlegand: “Es la verdad, técnicamente, lo que dices. Eso se practica en el beisbol profesional y más en los Estados Unidos. Es una parte de todos los movimientos que deben hacer los catchers, pero no todos lo hacen. Es muy importante porque muchas veces se producen tiros descontrolados y con eso puede evitarse el avance de bases extras.
Cesáreo, añadió: "si un jugador, a la defensiva tiene miedo de una jugada fuerte, ¿para qué se mete? Beto Ávila me dijo, en el café La Merced, "hay que tener guts"......Y todos sabemos lo que eso significa. Un saludo, ("sin Peña ni Gloria", diría aquel, ja, ja).