18 de Agosto de 2018

Hace ya tiempo, en junio de 2006, Enrique Krauze escribió en Letras Libres un artículo que tituló El mesías tropical, en el que recogió el concepto de democracia que tiene AMLO: “El gobierno es el pueblo organizado o, para decirlo de otra manera, el mejor gobierno es cuando el pueblo se organiza”. En ese mismo texto, el historiador contó que cuando conoció al ahora Presidente electo, en un desayuno en el ayuntamiento de la Ciudad de México, éste le manifestó su convicción de que “el pueblo no se equivoca”.

Al anuncio hecho ayer por el Presidente electo, en el sentido de que la decisión definitiva sobre el nuevo aeropuerto emanará de una consulta pública, a realizarse a finales de octubre próximo, confirma lo que le dijo al historiador: El pueblo es el mejor gobierno.

Hay dos opciones sobre la mesa acerca del aeropuerto:  Continuar con el avanzado proyecto en el Lago de Texcoco o construir dos pistas en la Base Militar de Santa Lucía y conservar el Aeropuerto Benito Juárez. En Texcoco, que tiene avanzado un 30% la obra, se han invertido ya más de 60 mil millones de pesos; hay otros 120 mil millones más que están comprometidos. Cancelarlo costaría 100 mil millones de pesos, según Javier Jiménez Espriú, próximo titular de la SCT. Si se continúa el proyecto, los costos de mantenimiento serían más altos. La Base Militar de Santa Lucía tiene la ventaja de que sale más barato, pero el inconveniente de tener operaciones separadas implicaría costos más altos e incomodidad para los pasajeros.

No hay claridad sobre los detalles de cómo se realizará la consulta. Tampoco hay pistas sobre las preguntas.

Nomás falta que se nos convoque al Zócalo y plazas de armas en todo el país, y se vote a mano alzada. 

Lo que es un hecho es que López Obrador hizo campaña en contra de que el proyecto se continúe en Texcoco y hasta dijo que “es un atraco” para favorecer a la mafia del poder.

Es cierto que antes de ir a consulta, el dictamen sobre el aeropuerto que ayer se dio a conocer será analizado por expertos del Colegio de Ingenieros y otras organizaciones ciudadanas.

Pero al final, será la ciudadanía, que ciertamente no cuenta ni con los elementos ni con el conocimiento para decidir sobre un proyecto tan técnico, la que tendrá la última palabra.

•  En el extranjero siguen con lupa los vaivenes de la megaobra del sexenio que viene. Las primeras reacciones son negativas. El grupo Eurasia, líder mundial en consultoría sobre riesgos políticos, ya sacó un primer reporte sobre el tema.

Dice que el anuncio de AMLO representa un riesgo significativo para el futuro del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, pero que también es una indicación de cómo López Obrador conducirá su administración.

“Utilizará este tipo de mecanismos participativos a favor de su propia agenda”, subraya la consultora. El reporte cita una encuesta reciente de Reforma, en la que se refleja que la mayoría de la gente está a favor de realizar una consulta sobre cómo avanzar con el proyecto (64%). El 38% quiere seguir adelante con la construcción, hay un 14% en contra y el 40% neutral. 

“Pero López Obrador ganó con un mandato muy fuerte y una oposición muy clara al proyecto. Esto probablemente hará que algunos votantes apoyen su posición”.

Conclusión: “Como tal, la consulta pública ahora hace poco probable la continuación del proyecto actual (60% de probabilidad de ser cancelado).

“Esto probablemente represente un impacto para las empresas involucradas en el proyecto y para el precio de los bonos emitidos para financiar su construcción”.

Más allá del aeropuerto, el hecho de que López Obrador esté utilizando la consulta pública como método de gobierno en un proyecto tan técnico arroja algunas ideas sobre su estilo de gobierno. “Los mecanismos participativos se convertirán en una herramienta común durante su administración y se utilizarán para obtener la validación de los planes y proyectos que desea implementar”.

“Además, es probable que utilice estos métodos participativos de forma estratégica, sólo en aquellas ocasiones en que cree que el público apoyará sus puntos de vista”.

“El riesgo político está a la vista. Dado el hecho de que AMLO enfrentará controles y equilibrios débiles, su gobierno tendrá un espacio significativo para cambiar las políticas y las leyes casi a su propia discreción”.

• El periodista y escritor Rubén Cortés, exdirector del diario La Razón, nos envió ayer el texto que sigue en un WhatsApp: “Ando jodido con toda esta campaña en que se menciona mi nombre en columnas casi a diario como crítico de López Obrador y de Claudia Sheinbaum.

“Eso me  cerró puertas para encontrar trabajo”. Ya encarrerado, aclaró las versiones sobre el nuevo periódico que dirigirá y que, en principio, saldrá antes de diciembre próximo.

“Para empezar, sería un diario de lectura y absolutamente para nada de choque ni de oposición a Morena ni a nadie”, puntualizó. Más tarde, en charla telefónica, reiteró que el diario ni lleva dedicatoria para nadie ni costará 120 millones de pesos, como se afirma por allí. Tampoco se llamará  En Concreto. El nombre aún no se decide.

“Es un periódico de lectura, con suplemento cultural, columnistas jóvenes, que van a reseñar la situación política, y en el que van a colaborar escritores amigos míos”.

La plantilla será de alrededor de 25 personas. Una y otra vez negó que vaya a ser, como se afirma en varias columnas, “el periódico de Mancera”.

Es cierto que tendrá su sede en una casa de la colonia del Valle, donde políticos del Frente acudían con frecuencia durante la pasada campaña electoral. Héctor Serrano “la rentó”, nos asegura Rubén.

El financiamiento correrá a cargo de un “grupo de amigos” que se convertirán en accionistas.

• No es con purgas que el PAN logrará la urgente reconciliación del partido que fundó Gómez Morin.

Ayer echaron a 17 militantes del azul.

Si los azules se mantienen por el Sendero de Los Chuchos —sus socios y mentores del PRD— les va a pasar lo mismo que al sol azteca: Se van a quedar con el cascarón.

Ahora sí que Ricardo Anaya, Damián Zepeda y compañía no entienden que no entienden.