El virtual Presidente electo planea un ajuste en su gobierno. No hay más: Si quiere nuevos programas, como el de pensión universal para adultos mayores y el de aprendiz para contratar temporalmente a jóvenes estudiantes, entonces necesitará más recursos.

La obtención de más ingresos no es fácil, menos cuando el mismo López Obrador plantea no tener nuevos impuestos, no elevar las tasas ni crear nuevos gravámenes. Tampoco está por elevar la deuda pública. Y lo único que le queda es el ajuste en el gasto… que ya se trabaja.

ADIÓS DUPLICIDAD DE 147 PROGRAMAS

El próximo equipo hacendario, a cargo de Carlos Urzúa, ya trabaja en el ajuste que viene. Ahí están inmersos quienes serían los dos subsecretarios, el de Hacienda, que es Arturo Herrera, así como el de Egresos, que sería Gerardo Esquivel.

Este equipo ha planteado un ajuste viable, en primer lugar, al eliminar toda la duplicidad de programas. El mismo Gerardo Esquivel ha dado a conocer que, tomando el análisis del Coneval, la duplicidad de programas llega a ser de hasta 147, en donde se esperan fusiones, desapariciones o eficiencias. El mejor ejemplo de estos programas duplicados es el de empleo temporal, que existe en varias secretarías con el mismo objetivo.

UNA COMUNICACIÓN SOCIAL… NO VEINTE

También se buscaría una reingeniería del gobierno. En primer lugar, ya no habría tantas Direcciones de Comunicación Social, donde, hasta la fecha, cada dependencia gubernamental tiene su equipo de comunicación.

Por lo dicho por Andrés Manuel López Obrador, la Comunicación Social se concentraría en la Presidencia de la República, y las secretarías y órganos quizá lleguen a tener pequeños equipos de comunicación social.

López Obrador plantea tener “una oficina de prensa para el gobierno, pero no las 20 actuales”. Y aquí viene el otro punto: La publicidad del gobierno sería, también, centralizada y focalizada.

Otro tema de reingeniería serían las delegaciones de las secretarías de Estado, donde se buscaría consolidar las delegaciones federales para evitar tantos gastos. También se restringirán los costos en asesores. Habrá alrededor de cinco asesores por secretaría. No más.

SÍ VA COMPRA GUBERNAMENTAL
POR OFICIALÍA MAYOR DE HACIENDA

Otro punto donde vendría el ajuste, y la obtención de más ingresos, es en la consolidación de todas las compras gubernamentales.

Esto lo ha dicho Urzúa, y se trata de retomar el éxito que tuvo la compra consolidada de medicamentos de todo el sector público. Ahí se plantea que la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda sea, prácticamente, la única que pueda contratar y comprar a proveedores.

Las demás oficialías serían menores. Se concentrarían todas las compras de gobierno en dicha Oficialía Mayor de Hacienda.

REDUCCIÓN DE SALARIOS; CAMBIARÁN ARTÍCULO 127 CONSTITUCIONAL

Vendría la reducción de salarios en los altos rangos del gobierno. Se enviaría como iniciativa preferente la modificación el Artículo 127 Constitucional para que ningún funcionario público pueda ganar más que el Presidente, y él mismo se bajaría el salario.

Habría que revisar cuánto se ahorran en esos salarios, porque quizá ni sea tanto el ahorro, y más bien pueda abrir la intención de poder completarlo por otras vías. Como sea, la reducción salarial de mandos como el Presidente, secretarios y subsecretarios parece ser un hecho.

Los gastos de seguros médicos privados para la burocracia de alto rango también desaparecerían. La lógica es que los burócratas de alto rango, como los demás, utilicen el ISSSTE como su seguro médico y así ayuden a presionar para que ofrezca una mejoría en la calidad médica que ofrece.

El próximo gobierno ya trabaja en esta reingeniería y ajuste. No hay ajuste en el gasto fácil. Vamos a ver. El objetivo de López Obrador y su equipo es liberar recursos para otros programas comprometidos en campaña, como el de pensión universal para mayores de 65 años, así como el de dar trabajo temporal a jóvenes para que obtengan una competencia laboral.