Viernes, Marzo 29, 2024
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Si el recordar es vivir.-----

Si el recordar es vivir, recuerdame  para vivir siempre en tí.
Esto me lo escribió hace mil años una noviecita que tuve cuando
estaba en la vocacional #7 del IPN allá en México City.
Bien, recordar es vivir y por eso reproduzco un artículo del
sr. Dario Célis que leí en EXCELSIOR EL 21 DE AGOSTO DE 2018.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

POR: DARÍO CELIS

 | EXPERTO

Columnista en Excélsior.

  • s.
 

Carlos Salinas  ha dicho que  entrando AMLO al poder se irá a vivir a Europa, donde viven otros ricos mexicanos y que vendrá a México unas tres veces por año.

Uno de ellos es David Martínez, el sagaz financiero regiomontano que, al igual que Salinas, reparte sus agendas entre Nueva York, México y Londres, ciudad esta última donde radica y donde conoció al expresidente. ¿Por qué le contamos todo esto? Por una “minicumbre” muy particular que se acaba de dar.

Fue hace alrededor de dos semanas en la Ciudad de México. David Martínez y Carlos Salinas se reunieron con Alfonso Romo, quien será el próximo jefe de la Oficina de la Presidencia. Los tres son viejos conocidos que ahora están unidos por el proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM).

Según dijo Javier Jiménez Espriú, el viernes pasado, el nuevo aeropuerto ya anda en los 300 mil millones de pesos de costo. Quien será secretario de Comunicaciones y Transportes con López Obrador no está muy convencido de él.

Jiménez Espriú, el mismo AMLO, pero sobre todo el empresario constructor José María Riobóo representan el ala anti NAIM. Por el contrario, Romo y los técnicos encabezan el otro bando, el que pugna por su continuidad porque saben que abortarlo implicaría un desastre financiero para México.

Y precisamente ése fue el tema de la plática que sostuvieron hace un par de semanas Salinas, Martínez y Romo. Los primeros pidieron a quien será el número dos de la Presidencia que haga entrar en razón a AMLO, que cancelarlo disparará el riesgo país, deteriorando unas finanzas públicas de por sí endebles.

Porque no sólo son los dos mil millones de dólares que bancos colocaron en 2016, o los cuatro mil millones de dólares de bonos verdes que se emitieron en 2017, o los cerca de 30 mil millones de pesos de la Fibra E que adquirieron afores y otros inversionistas institucionales. Hay en juego mucho más.

Una cancelación del nuevo aeropuerto arrastraría la calificación de las emisiones de deuda de Pemex, que dirige Carlos Treviño, y la CFE, que comanda Jaime Hernández, pero pegaría a las de las principales empresas, como América Móvil, Grupo México, Banorte, FEMSA, Bimbo o Arca Continental.

¿Por qué Salinas y Martínez salen a abogar por el NAIM? No sólo está el evitar una corrida financiera contra el riego país. También está la posibilidad de que López Obrador decida concesionarlo a un privado. Y ahí es donde se asoman los intereses de los dos grupos que se lo disputarían ferozmente.

No sabemos si Salinas traiga atrás a Carlos Slim, de hecho lo dudamos porque el beneficiario de la privatización de Telmex a manos de aquél, no necesita lobbistas. Pero lo que sí sabemos es que Martínez aboga por ICA, la constructora que rescató y que ha ganado siete licitaciones relevantes.

No hace mucho le adelantamos aquí que si la salida era privatizar el NAIM, como lo pidió públicamente Slim, quien posee también contratos de construcción y adquirió 43% de los certificados de Fibra E, el de Carso estaba equivocado si creía que se comería solo ese gran pastel.

Así que, señoras y señores, la temporada de patos se abre. Haga sus apuestas.