En fin, el dólar ya había llegado a $12.50 X1, pero vivíamos un México tranquilo, agradable y, para los jóvenes el futuro dependería de estudiar una carrera profesional para vivir mejor y, ya dependería de cada quien llegar a ser rico por la vía del trabajo honesto, fecundo y creador.

Entonces ya se escuchaba hablar de los gomeros, o sea los narcotraficantes, pero, no había las matanzas que ahora hacen, ni se escuchaban  tan frecuentemente los corridos que se les componían a los señores de las drogas, eso sí, se sabía quiénes eran los que mandaban, pero, Sinaloa era tierra en donde se podía vivir a gusto.

Habían pasado los días de Miguel Alemán Valdez como presidente, quien salió dejando la fama de haber sido el presidente más ladrón de los últimos tiempos, eso sí, durante su mandato se construyeron grandes obras entre ellas la ciudad universitaria de la UNAM que se inauguró un 20 de noviembre de 1952.

Siguieron otros presidentes que ponían los gringos y tanto mandaban que pusieron a Gustavo Díaz Ordaz y a Luis Echeverría Álvarez, quienes previamente habían trabajado para la CIA y los habían puesto en la Secretaría de Gobernación, la antesala de la presidencia, de allí brincaron a Palacio Nacional, Miguel Alemán, Adolfo Ruiz Cortinez, Gustavo Diaz Ordaz y Luis Echeverría Alvarez-

En ese inter la vida nacional era tranquila, con excepción de cuando entró la URSS a querer invadir a México y formó el partido comunista y fue cuando los estudiantes de Economía del IPN y la UNAM traían en sus bolsillos pequeños libros que hablaban de comunismo, los autores predilectos de ellos eran Carlos Marx y Friedrich Engels, también hablaban de Lenin, Stalin, León Trotski, Rosa Luxemburgo, Antonio Gramsci, Georg Lukács o Mao Zedong.

Obviamente se hablaba de Fidel Alejandro Castro Ruz y el popular Ernesto Guevara, el famosísimo Ché. “Hasta la victoria siempre” era el grito de guerra de todos esos chamacos, y se creían que eran una copia del Comandante  Ché Guevara y decían ser afines al marxismo-leninismo.

El marxismo se asocia principalmente al conjunto de movimientos políticos y sociales que surgieron durante el siglo XX, entre los que destacaron la Revolución rusa, la Revolución china y la Revolución cubana. Y por no dejar, el movimiento estudiantil de 1968 en México.

Uno de los picados por esas ideas fue AMLO nada más que como no fue un buen estudiante, mal las aprendió y ahora estamos como estamos.

Pero, seguimos haciendo lo que quieren los gringos y yo estoy seguro que AMLO depende de la White House, como dependieron todos los anteriores desde Álvaro Obregón a la fecha.

Por eso, dígase lo que se diga, los mexicanos estamos pendientes de lo que pasa en USA, tal vez porque soñamos que un día se decidan a ponernos gringos a gobernar a cada estado y depender más directamente aún de las órdenes del Presidente de los Estados Unidos y así, apaciguar a los del crimen organizado y que haya paz social.

Total como decía uno de mis Profesores de Fiscal, al final del ´pago de nuestra contribuciones no escaparemos jamás, y de trabajar para comer tampoco, pero, ni comparación los servicios públicos que reciben los ciudadanos gringos a los que recibimos los mexicanos.

Y así, llegamos a que  a menos de 100 días de las elecciones en EUA, más estadunidenses consideran que el país va por la dirección equivocada que en cualquier otro momento durante la presidencia de Donald Trump, dice una encuesta reveladora de las dificultades que aguardan al republicano en su duelo contra el demócrata Joe Biden quien  tiene a su favor el 68% de la voluntad del pueblo norteamericano.

El 32% de la población aprueba la gestión de Trump, afectándole su la lucha contra el coronavirus, un piso que no se había visto antes, según el sondeo realizado entre la AP y el Centro NORC para Investigaciones Políticas.

Incluso la aprobación hacia el manejo de la economía, que antes era un punto fuerte de Trump, ha estado cayendo. Las malas noticias han provocado un abrupto cambio de estrategia por parte de la campaña republicana y de la Casa Blanca.

Luego de meses en que desestimó el coronavirus y el resurgimiento de la enfermedad, Trump la semana pasada advirtió que las cosas probablemente empeorarán antes de mejorar.

Tras minimizar la importancia de usar cubre bocas para protegerse del virus, súbitamente Trump llamó a la población a hacerlo.

Y tras insistir en que realizará una gran convención partidista en agosto, eventualmente tuvo que cancelar esos planes. Los súbitos repliegues reflejan la difícil situación en que se encuentra el mandatario faltando tres meses para las elecciones.

Aunque ahora está tratando de definir la contienda como una guerra entre el caos y “la ley y el orden”, sus perspectivas reeleccionistas dependen de su manejo de la crisis del coronavirus y de si el electorado cree que el país avanza en la dirección correcta bajo su conducción.

En ese sentido, la encuesta deja claro que las cosas se ven cuesta arriba para el mandatario: 8 de cada 10 estadunidenses opinan que el país va en la dirección equivocada, más que en cualquier punto de la presidencia de Trump.

Los ciudadanos afroamericanos están en contra de Donald Trump desde el principio y ahora con los abusos que los blancos desde la administración han cometido con los afroamericanos y los latinos, hay un gran número de mestizos ( hijos de gringos con gente de  otras nacionalidades) que son ciudadanos norteamericanos, que odian al pinche Trump.

Así que lo más seguro es que ya valió Trump.

Los demócratas creen que el ex vicepresidente ganará si la campaña se convierte en un referéndum sobre la gestión de Trump. “ La gente está harta de un gobierno que está paralizado y dividido y no es capaz de hacer que las cosas funcionen”, declaró Kate Bedingfield, subdirectora de la campaña de Biden. Lo que la gente dice percibir de Trump en estos momentos es una mezcla incoherente de retórica arrogante y egoísta”, añadió.

Así que JOE BIDEN luce ahora mismo como el  próximo presidente de E.U., pero eso no cambiará en mucho lo que en el futuro de México venga, como decía mi abuelito, Veterano de la Revolución, herido varias veces en el campo de batalla y que estuvo presente con Juan Carrasco en la toma de Mazatlán, “ vivamos a plenitud que lo mismo dá ser de los españoles que de los gringos, somos siervos de la Nación”.