La Fiscalía española declinó facilitar información a Arely Gómez
Funcionarios de la embajada recogieron en el aeropuerto a los abogados de Moreira
J.M.I. MADRID
La embajada de México en Madrid no ha respondido a ninguna de las preguntas que le ha remitido EL PAÍS sobre las gestiones llevadas a cabo por sus funcionarios tras la detención de Humberto Moreira y se ha limitado a remitir un comunicado de prensa que hizo público después de su detención.
En la nota del pasado 16 de enero se destaca que “la representación mexicana en España velará porque el caso del señor Moreira Valdés se apegue al debido proceso y con respeto a los derechos humanos, al tiempo le brindará asistencia consular en caso de que le sea solicitada, como ocurre en el caso de cualquier ciudadano mexicano sujeto a requerimientos judiciales en el exterior”.
La legación diplomática añade que la Sección Consular de la Embajada actúa con apego a lo que establece la Convención de Viena sobre relaciones consulares, en su artículo 36, párrafo C que indica que “los funcionarios consulares tienen el derecho de asistir y visitar a sus connacionales que se hallen arrestados o en prisión preventiva, a conversar con ellos e incluso a coadyuvar en su defensa ante los tribunales a fin de garantizar el debido proceso”.
Miembros de la PGR llamaron a la Policía española reclamando información sobre el caso. El silencio fue la respuesta
El pasado día 9 Pedraz dictó un auto por el que acordaba el archivo provisional de la causa contra Moreira. El fin de semana anterior el magistrado había escuchado en su casa la cinta de tres horas de duración que grabó en San Antonio (Texas) a un testigo protegido y concluyó que las acusaciones que este vertía contra el ex gobernador sobre su supuesta relación con la banda de los Zetas no eran suficientemente concretas.
Los fiscales Grinda y Rosa que viajaron también a EE UU invitados por un fiscal norteamericano no piensan lo mismo y han recurrido el archivo del caso. La investigación sigue secreta y abierta en España respecto a otras personas involucradas, algunas mexicanas.